La preparación para el nuevo ciclo lectivo comienza en julio

Las librerías se preparan con anticipación para el inicio del nuevo año lectivo 2012-2013. Thierry Sebástia, gerente general de Librería Española, indica que en su negocio los preparativos arrancan en julio y que para el 20 de agosto debe tener completamente abastecidos los siete locales que cuenta esta empresa en todo el país.

Adicionalmente, dice, se contrata a 30 personas temporales, que se suman a los 70 empleados que trabajan de planta.

“Antes de la temporada escolar, capacitamos a todo el personal. Esta es una temporada muy importante, pues las ventas suben casi en un 50% -explica Sebástia-. Es por eso que los empleados no pueden tomar vacaciones estos meses”.

En esta librería se ofrecen textos escolares, libros especializados, material de lectura... Eso generó, entre agosto y octubre del 2011, ingresos cercanos al millón de dólares. Según Sebástia, en esta época cuenta con 300 proveedores, mientras que el resto del año solo requiere los productos de 180.

Según el Censo Económico, del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), solo en la Sierra existen 897 librerías que venden sus productos al por menor, mientras que en la Amazonía se registran 57. El total de trabajadores en estos negocios no supera los 99 empleados en cada local.

En la cadena de librerías Libri Mundi también se preparan desde julio. Su gerente de Marketing, Juan Carlos Guevara, resalta la importancia de no descuidar a los clientes que visitan sus locales por lecturas ajenas a esta temporada. “No debemos descuidar tampoco los estantes de literatura universal, poesía, cuentos, ensayos... pues ese sector es el que vende el resto del año”, indica.

Libri Mundi, al igual que Librería Española, amplia sus horarios de trabajo durante la época escolar, de lunes a viernes atienden desde las 09:00 hasta las 20:00 y fines de semana, hasta las 19:00.

En la librería Bitácoras, ubicada en el norte de Quito, su principal producto no son los textos escolares sino de literatura. En estas fechas, explica Carmen Llerena, los libros que más se venden son los de literatura ecuatoriana y cuentos para niños de escuelas y colegios.