Belén Bustamante y Pamela Carrera manejan el negocio. La producción mensual es de 50 unidades por cada uno de los siete productos. Foto: Patricio Terán / LÍDERES

Belén Bustamante y Pamela Carrera manejan el negocio. La producción mensual es de 50 unidades por cada uno de los siete productos. Foto: Patricio Terán / LÍDERES

Accesorios para bebés, la oferta de este equipo

12 de junio de 2017 16:04

La escasa oferta de accesorios nacionales para bebés en el mercado local y el alto costo de los productos importados motivó la creación de GiggleMe. Este emprendimiento fundado por Belén Bustamante y Pamela Carrera, en diciembre de 2016, se dedica a la producción y venta de accesorios para bebés.

La idea originaria fue de Bustamante, quien al ser tía de dos niños pequeños se dio cuenta de la oportunidad de cubrir una demanda “Mis hermanos se traían todo de Estados Unidos porque acá todo es más caro”.

Bustamante es licenciada en Comunicación Organizacional, con una maestría en Marketing. Para crear la pequeña empresa, le faltaba un socio con conocimientos en producción.

Pamela Carrera fue el complemento. Ella es administradora en Recursos Humanos y Empresas, y hace cinco años fundó una empresa especializada en la comercialización al mayor de artículos promocionales.

Ahora Carrera divide su tiempo entre las dos empresas, mientras que Bustamante decidió renunciar a su trabajo anterior para dedicarse por completo al emprendimiento, para el que requirió una inversión inicial de USD 4 000.

El producto estrella de GiggleMe es un sonajero de pies y manos, útil para la estimulación del bebé. Otro artículo novedoso es un cobertor de tela para los carritos de supermercado o las sillas para bebés de los restaurantes, que protege a los pequeños de posibles gérmenes.

Los otros productos que ofrecen actualmente son la almohada de lactancia, ‘clippers’ para el chupón, organizadores, bodies con frases y un bolso de mano impermeable para la ropa y otros artículos del bebé.

Las telas son compradas a proveedores nacionales y la confección de los accesorios está a cargo de cuatro costureras.

 GiggleMe está facturando entre USD 1 000 y 1 500 mensuales. El principal canal de ventas es su página de Facebook y trabaja con servicio de entrega a cualquier parte del país. En promedio, cuentan con 100 clientes al mes.

Colorín Colorado, un centro enfocado en el desarrollo del ser humano, es uno de sus clientes. En este lugar se exhiben los productos de GiggleMe. “Me parecen innovadores y tienen un buen precio comparado con el mercado de Ecuador”, comenta María José Guarderas, propietaria del centro.

Irene Donoso, abuela de un bebé de 11 meses, les ha comprado en dos ocasiones ‘clippers’ para el chupón. “El producto es estupendo, tanto que mi hija pidió otro par”, señala Donoso.

Hace dos meses y medio comenzaron a exportar a Chile. Además de consolidar la distribución de sus productos en ese mercado, la meta de GiggleMe es aumentar el volumen de ventas. Encaminadas hacia ese objetivo se encuentran en negociaciones con tres tiendas especializadas en artículos para bebés.