Byron Villacís es el exdirector del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) . Foto: Julio Estrella / LÍDERES

Byron Villacís es el exdirector del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) . Foto: Julio Estrella / LÍDERES

Byron Villacís: ‘El crecimiento no está balanceado’

17 de enero de 2018 09:20

El exdirector del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) explica que la cifra negativa de inflación anual es un grave síntoma de la situación económica. Considera que es necesaria una reactivación del consumo de los hogares a escala nacional.

Ecuador registró una cifra de inflación anual de -0,20% a diciembre del 2017. ¿Cuál es su lectura sobre esto?

Ya no se trata de una caída de solo un mes, de dos o de corto plazo. Al evidenciar que la inflación anual registró una cifra negativa, significa que la caída de precios a escala nacional es sostenida, lo suficiente como para atreverse a decir que estamos iniciando un proceso de deflación.

¿Ya estamos en deflación?
Es un poco subjetivo llegar a esa conclusión porque el Fondo Monetario Internacional (FMI) dice que deben haber dos semestres consecutivos con cifras negativas, otros dos trimestres, otros períodos de largo plazo. Mi percepción personal es que ya podemos decir que estamos en deflación porque el indicador anual es negativo.

Ecuador es un país dolarizado, ¿cuál es el efecto de una deflación en este sistema?
Este diagnóstico en dolarización es preocupante porque es un síntoma, una especie de alerta que dice que la economía se enfrió, que está en estancamiento. Si bien es cierto que hay datos con relación a un crecimiento del PIB (se proyecta un crecimiento del 1,5% en el 2017), el indicador de inflación va de la mano y nos muestra que la economía no se encuentra en buena salud.

Es algo contradictorio.
No. Lo que las cifras muestran es que el crecimiento de la economía no está balanceado en los diferentes sectores. Si en un país el PIB crece muy poco y los precios caen quiere decir que los componentes del PIB no tienen el mismo peso. El sector de la construcción, por ejemplo, no está bien; otros sí. La economía, en este caso, está siendo salvada por unos sectores y no por un comportamiento general.

¿Qué elementos se debe analizar para ver la situación de la economía de un país?
Básicamente son tres. El primero es el crecimiento, que nos muestra que el país está haciéndolo muy poco. El segundo es el de precios, que nos dice que están en caída. Y el tercero es el de desempleo y subempleo, que nos muestra que las condiciones de trabajo se encuentran estancadas.

¿La economía no se está recuperando?
El crecimiento que hay no es tan fuerte como para que la economía se recupere. La deflación tiene efectos muy negativos.

¿Cuáles?
Cuando se tiene una caída de precios hay tres efectos. El primero es que las personas van a esperar que los costos bajen más. Por ejemplo, si un zapatero vendía un par siempre a USD 100 y luego un mes a 90, luego 80 y así, los consumidores se van a dar cuenta y van a esperar a que bajen más, dejando de consumir. Allí se produce el segundo efecto: como el zapatero no vende y necesita librarse del stock que tiene se da cuenta de que para tener dinero debe reducir su nómina y despide gente o deja de contratar, impactando los niveles de empleo. El tercer efecto es que sin dinero, no hay consumo y se contribuye más al círculo en el que la economía se contrae.

Hay rubros, según muestra el INEC, que varias veces han influido en la inflación negativa. No están relacionados a productos de consumo básico o diario. ¿Qué tan fuerte es su peso en los resultados registrados el año pasado?
Durante el 2017 ha llamado la atención, al menos dos veces, que las entradas para eventos deportivos aparezcan como uno de los productos que más impacta en la caída de la inflación. Me preocupa porque, si bien es cierto, una parte de la población consume ese producto, no es una cantidad significativa. Esto genera mucha inestabilidad en el índice de precios, está sesgando el resultado final. A veces crece mucho, a veces baja mucho e impacta el resultado.

¿Si no se tomara en cuenta las entradas a eventos deportivos podría variar el dato de inflación anual?
Si no se le hubiera incluido en diciembre la deflación sería mayor. Esa conclusión es bien grave. Sería comprensible si fuera otro rubro como gasolina o pan. Pero no es posible que impacte tanto un producto como las entradas a eventos deportivos.

Las cifras del INEC a diciembre también muestran que rubros como el de restaurantes y hoteles impactan fuertemente en una cifra negativa. Llama esto la atención porque son servicios sumamente activos a fines de año.

Hay establecimientos que pudieron bajar precios o hacer promociones en temporada. No debería bajar tanto y el hecho de que sea la categoría que más impactó en la inflación negativa muestra que es un sector estancado. Es un ejemplo de cómo la economía está enfriada. No hay incentivos suficientes para que haya un nivel de consumo adecuado.

¿Cual es la idea para evitar que la deflación sea mayor?
Lo primero es tener un programa económico explícito que enfrente este problema. Lo que es urgente es que se reactive el consumo de los hogares. Mi posición personal es intermedia, creo que sí se puede reasignar el presupuesto del Estado para que se gaste mejor. Hay rubros en los que se está gastando inútilmente.

¿Qué ajustes deben hacerse?

Hay ciertos proyectos de inversión que no son necesariamente urgentes. Si es que se los reasigna y se reubica el dinero en áreas para promover el consumo hay probabilidades altas de lograr este objetivo. Por ejemplo, si se invierte más en el sector de educación los estudiantes y los padres consumen más. También es importante reactivar la vivienda con más asignaciones de capital para impulsar el consumo y el incremento de los precios.

¿Qué pasa en la parte social?

El principal afectado de una deflación y estancamiento de la economía es aquel que pierde su empleo. Entonces, el Estado debe enfocarse también en los sistemas de protección social. Debe haber vías para que la gente halle trabajos estables o se mejore el mecanismo de seguro de desempleo.

¿Cual es el papel del ciudadano común en la coyuntura?
Debe ser más inteligente en saber cómo gastar. Como es probable que el empleo no se recupere los gastos deben ser más planificados. Por ejemplo, se debe comprar en volumen o adquirir artículos en base a la estacionalidad porque son más baratos. En la parte de trabajo la situación es complicada. El ecuatoriano enfrenta el subempleo. Si la persona está en esa condición está desprotegida y necesita el apoyo del sector productivo y del Estado. Ahora Ecuador está como dormido.

Hoja de vida

Formación. Es economista de la Universidad San Francisco de Quito y tiene una maestría en economía en la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso). Estudió política y gobernabilidad en un programa conjunto entre la Universidad Católica y la Universidad George Washington. También estudió métodos cuantitativos en la Universidad de Michiga. Actualmente, estudia un PhD en Berkely.

Experiencia. Ha sido catedrático en diferentes universidades del país y ahora es instructor graduado en Berkeley. Fue director del INEC por cinco años y medio; también fue presidente del Comité Andino de Estadísticas. Ha desarrollado diferentes trabajos de investigación en el sector privado desde que tenía 22 años.