Carol Marcial invirtió USD 10 000 en la obtención de las cinco certificaciones de calidad que posee su marca. Foto: Galo Paguay/LÍDERES

Carol Marcial invirtió USD 10 000 en la obtención de las cinco certificaciones de calidad que posee su marca. Foto: Galo Paguay/LÍDERES

Su chocolate cruzó fronteras gracias a las certificaciones

12 de septiembre de 2017 15:39

Con una inversión de USD 10 000, Carol Marcial, guayaquileña de 27 años, puso en marcha una estrategia que desde junio le ha permitido exportar alrededor de una tonelada de semielaborados de cacao y chocolates orgánicos a Suiza, Francia, España, Canadá, Corea del Sur y Estados Unidos.

Esta joven radicada en Quito emprendió su negocio en la capital el 2016 bajo la marca Perla Organic Chocolate. Sin embargo, sus ventas comenzaron en el 2017, cuenta la emprendedora, debido a que todo el 2016 lo dedicó a obtener certificaciones de calidad.

“El nicho de mercado de mi producto es el extranjero, allá aprecian más el producto orgánico y el cacao ecuatoriano de fino aroma tiene muy buena reputación. Entonces me di cuenta de que las certificaciones de calidad le podían dar un valor agregado mayor a mi producto a nivel internacional”, cuenta Marcial. Con un préstamo que hizo de USD 10 000, implementó procesos y requerimientos para obtener tres certificaciones internacionales.

Para EE.UU., el principal destino de las exportaciones del Ecuador, Marcial obtuvo la certificación orgánica USDA, otorgada por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos. Para el mercado europeo, en cambio, obtuvo la certificación orgánica de calidad NOP-EU.

Además, decidió obtener un certificado especial para el mercado que representa las comunidades judías en el mundo. Se trata de la certificación de la Unión Ortodoxa Kosher, que garantiza que el producto se elabora conforme con el halacha (ley judía) y supervisa los ingredientes y el proceso de producción.

Actualmente, el 15% de la producción de Perla Organic Chocolate se vende en tiendas nacionales. La marca está en los locales de Fybeca, del delicatesen El Griego y también El Español.

El emprendimiento de Marcial también cuenta con dos certificaciones nacionales. La Certificación de Denominación Cacao Arriba, que otorga el Instituto Ecuatoriano de la Propiedad Intelectual (IEPI); y la de Buenas Prácticas de Manufactura (BPM), que otorga la estatal Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa).

“Cada proceso toma meses. No puedes sacar una certificación de la noche a la mañana porque tienes que cumplir bastantes estándares de calidad. Las certificaciones me dieron un plus gigante en el exterior”, cuenta.

Marcial añade que otro factor que le ha permitido ganar mercado en el exterior es la variedad de sabores exóticos y presentaciones que ofrece a cada mercado.

En total, la marca ofrece 10 presentaciones de productos y unos 14 sabores, creados por Marcial.

Por ejemplo, la emprendedora destaca las barras gourmet con sabores como mango, canelazo, aceituna y sal, jengibre y quinua, entre otros. En el mercado asiático, cuenta Marcial, tiene acogida su producto en una presentación que se conoce como ‘drinking chocolate’ o chocolate a la tasa, con sabores como chocolate de café y uvilla. Otra línea con acogida es la de frutas como frutilla, mango, piña y cáscara de naranja, cubiertas de chocolate.