El crecimiento económico de Estados Unidos sufrió una sorprendente y fuerte ralentización en el primer trimestre del año, cuando solo aumentó un 0,2% en términos interanuales, según la primera estimación dada a conocer este miércoles 29 de abril por el Departamento de Comercio.

En el último trimestre de 2014, la economía estadounidense creció un 2,2%, mientras que en el tercero el aumento fue del 5%. Las cifras de crecimiento entre enero y marzo se sitúan muy por debajo de lo esperado: los expertos habían pronosticado una tasa de crecimiento del 1,0%.

Los economistas atribuyeron los datos al mal tiempo y las numerosas huelgas portuarias. Las nuevas cifras de crecimiento llegan pocas horas antes de que la Reserva Federal (Fed) anuncie sus decisiones en política monetaria.

Se espera que el organismo mantenga los tipos de interés en el bajo nivel actual y aplace la que sería su primera subida de tipos en unos nueve años. Hace unos meses, cuando la economía estadounidense registraba un mayor crecimiento, se dijo que la Fed podría acabar con su política de dinero barato ya en abril. Pero después los analistas apuntaron hacia el mediados de año o los meses posteriores.

Sin embargo, los datos de crecimiento estadounidense no son comparables con los de Europa, pues se calcula en términos interanuales, es decir, reflejan cómo crecería la economía estadounidense si se mantuviera el mismo ritmo durante un año.