Volkswagen pasa por una crisis debido a las fallas en sus automotores. Foto: AFP

El software, conocido como un ”dispositivo de desactivación", limita la salida de óxidos de nitrógeno tóxico durante la prueba a los límites legales. Foto: AFP

EE.UU. demanda a Volkswagen por engañosa campaña de 'diésel limpio'

29 de marzo de 2016 19:07

Estados Unidos demandó este martes a Volkswagen por engañar a las consumidores al promover autos diésel supuestamente “limpios” pero que contaban con dispositivos para engañar sobre la cantidad de gases contaminantes emitidos.

La Comisión Federal de Comercio (FTC) dijo que tramita que una corte federal ordene indemnizar a quienes compraron 550 000 autos VW y Audi con ese sistema entre fines de 2008 y fines de 2015. La Comisión demandó también que se prohíba a VW volver a utilizar ese tipo de dispositivos.

En su demanda, la FTC alegó que durante 7 años VW engañó a los consumidores promoviendo autos de bajas emisiones contaminantes, ajustados a las normas contra la polución y con buen valor de reventa.

Los autos involucrados se vendían a un precio promedio de aproximadamente 28.000 dólares. “Los dispositivos engañosos escondidos reducían significativamente el valor de reventa, según la FTC”.

Durante años, los anuncios de Volkswagen promovían los autos de “ diésel limpio ” de la compañía y ahora resulta que tenían sistemas para engañar en los tests de emisiones “ de gases contaminantes, dijo la presidenta de la FTC Edith Ramirez.

”Nuestra demanda busca compensar a los consumidores que comprar esos autos de Volkswagen basados en prácticas engañosas y desleales“, añadió.

Volkswagen, propietario de 12 marcas de automóviles y que hasta hace poco tenía la ambición de convertirse en el mayor fabricante del mundo, enfrenta problemas tras revelarse que instaló en los motores diésel de 11 millones de vehículos un programa informático para distorsionar los resultados de los tests antipolución, especialmente en las emisiones de óxidos de nitrógeno.

El software, conocido como un ”dispositivo de desactivación", limita la salida de óxidos de nitrógeno tóxico durante la prueba a los límites legales. Pero cuando los vehículos están en uso real, el software permite que arroje gases tóxicos a niveles de hasta 40 veces los permitidos. El problema afecta a vehículos de las marcas VW, Audi, Seat y Skoda.

La compañía está expuesta a demandas y multas por miles de millones de dólares.