El texto, conocido como 'Ley Macron' por el nombre del ministro de Economía, Emmanuel Macron, prevé varias medidas. Foto: Etienne Laurent/ EFE.

El texto, conocido como 'Ley Macron' por el nombre del ministro de Economía, Emmanuel Macron (fotografía), prevé varias medidas. Foto: Etienne Laurent/ EFE.

Gobierno socialista francés abre crisis al imponer reforma económica por decreto

17 de febrero de 2015 14:34

El gobierno socialista francés aprobó este martes, 17 de febrero del 2015, por decreto un polémico proyecto de ley de reformas de la economía, ante el riesgo de que diputados de su propio partido lo hicieran fracasar, abriendo una crisis política de consecuencias imprevisibles.

El texto, conocido como 'Ley Macron' por el nombre del ministro de Economía, Emmanuel Macron, prevé medidas como la apertura de comercios 12 domingos al año, la revisión de las tarifas que aplican desde jueces hasta notarios, la apertura de los transportes urbanos a la competencia o medidas para flexibilizar el mercado laboral, la vivienda y el medio ambiente.

El primer ministro, el socialista Manuel Valls, explicó que recurría al artículo 49-3 de la Constitución que permite al gobierno obviar al parlamento ante el riesgo de 'un rechazo' del texto, debido a la oposición al mismo de un sector de su grupo parlamentario.

Los opositores dentro del propio Partido Socialista están en contra de que esta ley sobre la 'actividad y el crecimiento' flexibilice el código laboral y en particular, se amplíe de 5 a 12 los domingos laborables.

En horas previas a la votación, el gobierno comprendió que los críticos de su propio partido, que cuenta con 288 escaños, iban a votar en contra de la Ley Macron, al igual que lo haría la gran mayoría de los diputados ecologistas, así como los del Frente de Izquierda y la mayor parte de la derecha haciendo correr el riesgo de perder la votación.

Crisis en el grupo socialista
A principio de la tarde, el primer ministro Manuel Valls obtuvo la luz verde del presidente François Hollande para recurrir a este artículo de la Constitución que permite al gobierno aprobar una ley sin votación en el parlamento.

El gobierno 'hará todo' lo posible para que esta ley "se apruebe porque es útil para el país", declaró Valls. Esta "es una medida de precaución", comentó a la AFP el politólogo Philippe Braud, ya que aunque no se excluía un voto positivo gracias a algunos votos de la derecha y del centro, "para un gobierno siempre es molesto deber el éxito a una parte de la oposición".

Es la primera vez que se recurre al artículo 49-3 desde 2006, cuando el entonces primer ministro Dominique de Villepin lo utilizó para aprobar la ley que facilitaba la primera contratación de los jóvenes, fustigada en aquella época por el actual presidente Hollande, quien era diputado. Los diputados de la Unión por un Movimiento Popular (UMP), principal grupo de oposición de derecha, anunciaron la presentación de una moción de censura contra el gobierno, que será debatida el jueves.

Si la moción de censura que será votada el jueves por la noche fuera aprobada, lo que parece poco probable dada la relación de fuerzas en la Asamblea, el gobierno tendría que dimitir, y si es rechazada, el proyecto de ley será dado como aprobado en primera lectura.

"La verdad estalla a la luz del día: no hay ni mayoría ni gobierno", comentó en Twitter el expresidente de derecha Nicolas Sarkozy, presidente del UMP. El texto, que será sometido esta primavera al Senado, cuenta con unos 200 artículos. El más emblemático es el referente al trabajo dominical que va a sacudir los hábitos.