José Sáenz colaboró en la empresa The Farm Bridge, dedicada a la distribución de rosas en EE.UU. En el 2008 obtuvo su BA en Eastern Washington University. Foto: Patricio Terán/ EL COMERCIO.

José Sáenz colaboró en la empresa The Farm Bridge, dedicada a la distribución de rosas en EE.UU. En el 2008 obtuvo su BA en Eastern Washington University. Foto: Patricio Terán/ EL COMERCIO.

En el ‘e-Commerce’ está su especialidad

5 de abril de 2015 13:50

En seis años, entre el 2008 y el 2014, el ecuatoriano José Sáenz se enroló y se destacó en tres corporaciones con operaciones globales.

En EE.UU., este quiteño colaboró para la gigante de las telecomunicaciones T-Mobile, de origen alemán; luego fue contratado por Microsoft, un monstruo del sector de informática; y continuó su trayectoria profesional en una de las compañías líderes del comercio electrónico: Amazon.

Desde hace seis meses es el Gerente General y Cofundador de Linio en Ecuador, otra plataforma de ‘e-Commerce’ cuya matriz se encuentra en México y que hoy opera en ocho países de la región.

Su trayectoria en el mundo de los negocios globales se dio por una serie de casualidades. Entre el 2000 y el 2002, Sáenz estudiaba Derecho en la Universidad de las Américas, en su natal Quito. Sus estudios avanzaban sin contratiempo hasta que sus padres decidieron radicarse en Seattle, EE.UU. El plan era abrir una empresa floricultora en Seattle, en el noroeste de EE.UU.

Su padre le pidió ayuda en la apertura de la empresa The Farm Bridge y Sáenz viajó con su familia. Este aficionado de la guitarra y del fútbol no conocía mucho sobre el mundo de los negocios, pero se fue adaptando a la actividad de la empresa familiar. Entre sus tareas estaba conducir el camión de la empresa para retirar las flores en el aeropuerto, la logística del negocio, el marketing, la planificación, entre otras.

Sus tareas le ‘abrieron los ojos’ y se trazó nuevas metas. Por eso, decidió estudiar Negocios en Eastern Washington University, entre el 2004 y el 2008. A todo lo anterior se sumó la responsabilidad de la paternidad.

Mientras estudiaba fue contactado por T-Mobile, en donde escaló posiciones hasta llegar a Gerente de Operaciones. Una de sus responsabilidades fue la distribución de equipos en Puerto Rico. Los rumores de venta de la compañía dañaron el ambiente, recuerda Sáenz. Mucha gente salió, incluido uno de sus exjefes, que luego lo contactó para una posición en Microsoft; en esta multinacional se desempeñó como analista durante un año.

Nuevamente, otro excompañero lo llamó para un nuevo cargo en Amazon, al que se enroló en agosto del 2012. Entre sus tareas estaba potenciar unos de los productos estrella de la compañía: el lector de libros electrónicos Kindle. “Fue un trabajo que me encantó. Cada persona que conocí era muy capaz y preparada, por lo que tenía que actualizar mis conocimientos de manera permanente”.

En Amazon viajaba a ferias de libros en América y Europa. Además, entendió el modelo del negocio del comercio electrónico.

Mohamed Shommo trabajó con Sáenz en él, en los lanzamientos de Kindle en México y en Brasil. “José tiene una impresionante habilidad para negociar. Tiene actitud
positiva y consigue las metas que se propone, a pesar de cualquier incertidumbre en el camino”.

Otro excompañero de Sáenz en Amazon es Nathan Rosembaum. Él cuenta que este quiteño trabajó muy de cerca con las agencias de escritores. “Su trabajo fue eficiente y siempre mantenía una actitud positiva en las reuniones de trabajo del equipo de Kindle”.

Sus funciones en Amazon le sirvieron de trampolín para manejar la operación de Linio en Ecuador. Se muestra optimista: “Tengo un equipo de trabajo de 16 personas muy comprometidas y queremos aprovechar las oportunidades que tiene el país en materia de comercio electrónico”.