Varios países se reúnen para discutir sobre los retos del sector agroalimentario debido al incremento de la demanda por el aumento de la población compatible con la sostenibilidad medioambiental. Foto: Archivo

Varios países se reúnen para discutir sobre los retos del sector agroalimentario debido al incremento de la demanda por el aumento de la población compatible con la sostenibilidad medioambiental. Foto: Archivo

Ministros de 45 países hablan de los retos agroalimentarios globales en París

7 de abril de 2016 09:59

La OCDE reunió el jueves 7 de abril del 2016 a ministros y representantes de 45 países, entre miembros y varias economías emergentes para discutir de los retos del sector agroalimentario, en particular una respuesta al incremento de la demanda por el aumento de la población compatible con la sostenibilidad medioambiental.

"El desafío es a la vez alimentario, con una población mundial que va a seguir creciendo, medioambiental por el cambio climático (...) y social", señaló a la prensa en la presentación de esta conferencia ministerial Stépane Le Foll, titular francés de Agricultura.

Copresidente del encuentro junto a su homólogo estadounidense Tom Vilsack, Le Foll insistió en que "tenemos todas las capacidades" para responder a las necesidades de un mundo con 7.000 u 8.000 millones de personas porque hay "un potencial muy importante" para aumentar la producción, pero también luchando "contra el despilfarro".

Además, afirmó que "en la lucha contra el cambio climático, la agricultura no es sólo un problema, sino que puede ser parte de la solución", y lo ilustró con la iniciativa francesa para absorber buena parte de las emisiones de dióxido de carbono.

Vilsack, por su parte, hizo hincapié en que la demanda de alimentos va a incrementarse en un 35 % en el mundo en paralelo a la expansión demográfica y señaló que para eso una de las vías es utilizar la comida que se produce "de forma más efectiva" puesto que actualmente casi un 30 % se malgasta.

"Creo que hay soluciones a los retos a los que nos enfrentamos", aseguró el responsable estadounidense que contó que su país está particularmente comprometido en compartir buenas prácticas con otros países par elevar la productividad y también para adaptarse a las consecuencias del calentamiento climático.

A ese respecto, explicó que desde la última conferencia ministerial de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) hace seis años ha habido un gran desarrollo del concepto de datos abiertos (open data en inglés).

El secretario de Agricultura estadounidense estimó también que desde hace seis años "hay un clima significativamente más favorable" hacia la importancia de la seguridad alimentaria.
Una cuestión que para su colega francés es crítica en la medida en que "un mal equilibrio puede conducir a una convulsión " social y geopolítica.

Lo ejemplificó con la carestía de productos de alimentación básicos como el pan, que estuvieron en los cimientos del estallido de las revoluciones árabes en países como Egipto en 2011.

Preguntados por si las conversaciones entre la Unión Europea (UE) y Estados Unidos para lograr un acuerdo de libre comercio e inversiones (TTIP, por su sigla en inglés) también estarán encima de la mesa de esta cita, que finaliza mañana, los dos ministros evitaron responder directamente.

Le Foll respondió que más allá de los intereses comerciales que uno y otro bloque puedan tener, hay "responsabilidades que superan esos intereses" y que comparten "puntos comunes".

El secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, avanzó que los ministros reunidos en París van a hablar durante estos dos días de cómo hacer unas políticas en el terreno agroalimentario "sostenibles y resistentes".

Destacó también que en el sector "hay también importantes oportunidades" por el mayor poder adquisitivo de las poblaciones que quieren igualmente una alimentación más equilibrada.

Además de los 34 países de la organización, al encuentro asisten ministros de otros Estados para los que la agricultura tiene una importancia particular como es el caso del argentino, Ricardo Buryaile, que aprovecha su viaje para presentar la nueva política de apertura del Gobierno del presidente, Mauricio Macri.