Política comercial

El memo de la semana

Tras seis años de haber desarrollado una agenda errática en la política comercial, el Ejecutivo revive al Ministerio de Comercio Exterior. El argumento que justifica la reincorporación de esta Cartera en el mapa gubernamental es tener un mayor acercamiento con el sector productivo y coordinar los temas relacionados con el mercado internacional.

Desde el discurso oficial se reconoce que no se tomaron en cuenta todas las facetas que contempla el comercio exterior y, por lo tanto, el trabajo que desempeñe este Ministerio será fundamental. Más aún, cuando se anuncia el interés de avanzar en las negociaciones de un acuerdo con la Unión Europea (UE) y posteriormente con el Mercado Común del Sur (Mercosur).

Una de las primeras acciones que consta en la agenda comercial tiene que ver con el futuro de las preferencias arancelarias andinas (Atpdea, por sus siglas en inglés). Estos beneficios que otorga EE.UU. al ingreso de productos ecuatorianos están próximos a fenecer, por lo que es prioritario definir acciones frente a esas eventuales pérdidas. El Régimen ha ofrecido soluciones temporales, pero el exportador requiere soluciones permanentes, más aún con su principal socio comercial.

Hace poco, este Semanario publicó un reportaje que refleja el fin de las exportaciones de alcachofa de una empresa ecuatoriana. Esa es una muestra de las consecuencias de no articular planes mutuos entre el sector público y privado, para impulsar las exportaciones nacionales.