Andrea Izurieta y Felipe Portilla, socios fundadores de la panadería, junto a Maricela Llano, en el local ubicado en Cumbayá donde también producen gran parte de la pastelería. Fotos: VIcente Costales / LÍDERES

Andrea Izurieta y Felipe Portilla, socios fundadores de la panadería, junto a Maricela Llano, en el local ubicado en Cumbayá donde también producen gran parte de la pastelería. Fotos: VIcente Costales / LÍDERES

La receta clásica de pan que crece como franquicia

5 de diciembre de 2016 10:27

La historia de este negocio inicia con el exfutbolista de Liga Deportiva Universitaria de Quito Enrique Portilla Castro. El exjugador -campeón en 1969 con el equipo albo- se dedicó a la panadería, luego de su retiro de las canchas.

La receta de esta exgloria del balompié la heredó su hijo Felipe Portilla. En el 2006, él junto con su esposa -y ahora también socia- Andrea Izurieta decidieron emprender y apostaron por la panadería y pastelería.

Así nació Pan del Parque, que en ese entonces estaba ubicado en un local de 40 m², en el parque de Cumbayá (nororiente de Quito).

Para iniciar los emprendedores invirtieron unos USD 35 000 -con un crédito bancario- que destinaron a la compra de maquinaria, insumos y adecuación del local.

El valor agregado de su negocio, sostienen los emprendedores, se basa en la elaboración de pan con procesos artesanales y en el buen servicio a los clientes.

En 10 años, Pan del Parque se ha expandido y crecido gracias a la venta de franquicias. Portilla comenta que desde que fundó su emprendimiento pensó en este modelo de negocios.

Ahora, la empresa cuenta con cuatro locales, dos de ellos franquicias: el de la avenida Brasil (norte), y La Primavera de Cumbayá. A estos se suman los dos ubicados también en esa parroquia: uno en el centro y otro en el sector de San Juan. Junto a ese último local funciona su planta de producción en donde se amasa la mayoría de sus ítems.

La primera franquicia ubicada en la avenida Brasil, comenta Izurieta, se vendió en el 2014. Y la segunda, en el sector La Primavera, en septiembre de este año.

Pese a su modelo de expansión, Pan del Parque busca mantener su esencia y trabaja para mantener sus estándares y la calidad de un pan artesanal. En el 2010, fruto de este esfuerzo, el negocio ganó el Primer Concurso de la Mejor Baguette por su pan centeno sin levadura, organizado por la Cámara de Comercio e Industrias Franco-Ecuatoriana y la Embajada de Francia en Ecuador.

Jorge Soria, auditor, comenta que es cliente del Pan del Parque desde hace más de un año. Él vive en Cumbayá y un día decidió probar un pan ‘ciabatta’ (pan blanco elaborado con harina de trigo); gracias a su calidad y sabor decidió volver y se convirtió en un cliente frecuente.
Soria cuenta que acude a la panadería pasando un día y prefiere una variedad sin levadura que le recetaron por su salud.

Pan del Parque
ahora produce 50 diferentes ítems que van desde pan popular de USD 0,16 hasta el sofisticado centeno artesanal de 600 gramos -elaborado con masa madre- a USD 2,45.

Álvaro Suárez es otro de los clientes del Pan del Parque. Él es el administrador del Café del Teatro y de un proyecto gastronómico denominado La Bella Easo, ubicado en El Café Para Ti, en Cumbayá. Para los dos negocios, Suárez compra un total de 250 panes mensuales.
“Tiene una increíble calidad ese pan. Yo he estado rebuscando muchas panaderías pero su calidad y precio están bastante bien”, sostiene Suárez.

Desde hace tres años, Karina Contag, emprendedora también es clienta del Pan del Parque. Ella destaca la ubicación de los locales y la calidad del producto. Contag comenta que asiste a la panadería dos o tres veces por semana.

La emprendedora confiesa que adquiere pan ‘baguette’ y los productos empacados, como bizcochos y otros postres.