Justin Denison, vicepresidente de Samsung America, durante la presentación del nuevo dispositivo. El precio en EE.UU. oscila entre USD 720 y 750. Foto: Drew Angerer / AFP

Justin Denison, vicepresidente de Samsung America, durante la presentación del nuevo dispositivo. El precio en EE.UU. oscila entre USD 720 y 750. Foto: Drew Angerer / AFP

Samsung deja atrás el fracaso y hace una nueva apuesta

3 de abril de 2017 13:14

El grupo surcoreano Samsung presentó la semana pasada su nuevo teléfono inteligente Galaxy S8, que incorpora un asistente virtual, es resistente al agua y no tiene botones en la parte frontal.

El nuevo modelo era muy esperado tras el fracaso del Galaxy Note 7, cuya producción fue detenida en octubre del año pasado después de que varios dispositivos explotaran o se incendiaran. El nuevo dispositivo estará disponible a partir del 21 de abril, anunció Justin Denison, vicepresidente de Samsung America, durante la presentación.

El primer asistente virtual de Samsung, que competirá con el famoso Siri de Apple, se llama Bixby, y le permitirá al smartphone “anticiparse a vuestras necesidades”, explicó Sriram Thodla, director sénior en el seno de Samsung America, en el lanzamiento. Bixby utiliza todos los datos del smartphone, entre ellos la geolocalización, para, por ejemplo, sugerir informaciones al usuario al salir de su casa.

Aparte del asistente virtual, una de las principales novedades es que no tiene un botón en la parte frontal como su antecesor y el iPhone. Como el Pixel, el smartphone lanzado por Google, la cara frontal es completamente lisa y “sin bordes” o biseles. Los dos teléfonos están equipados con pantallas de 5,8 pulgadas.

Los bordes redondeados, el tamaño de la pantalla, su liviandad y la delicadeza del dispositivo sedujeron rápidamente a los observadores, que recibieron con halagos este nuevo smartphone. “Estoy más impresionado de lo que imaginaba que iba a quedar”, dijo Patrick Moorhead, analista de la firma Moor Insights & Strategy después de la presentación. Todavía habrá que esperar para obtener una visión más clara del Bixby, dijo el experto.

“Me gusta lo que veo, pero tengo que utilizarlo, inspeccionarlo para ver si es realmente fácil”, añadió. Muchos observadores destacaron el precio relativamente alto del Galaxy S8, entre USD 720 y 750, más alto que el iPhone 7, que cuesta 650.

Para Jan Dawson, analista de la firma Jackdaw Reasearch, están asumiendo “un gran riesgo”. “Parecería que Samsung se posiciona respecto a lo que Apple lanzará más adelante este año más que en el mercado actual”, sostiene. Pero “es peligroso, porque en los próximos meses, Samsung competirá con iPhones menos caros”.

Las capacidades del procesador han sido mejoradas y reducido el consumo de batería, que además puede cargarse de forma inalámbrica. Pese a que fue el origen del fallo del Galaxy Note 7, los directivos del grupo surcoreano presentes en el evento no mencionaron el tema de la batería, cuya seguridad y capacidades el mercado mirará con lupa.

El Galaxy S8 y el S8 Plus están equipados con un sistema de identificación de opciones múltiples. Permite desbloquear el teléfono con un código secreto, conectando puntos de la pantalla y con la huella digital. Pero además, para mayor seguridad, trae un lector del iris. Samsung desveló también un adaptador, llamado Samsung Dex, que permite trabajar en el smartphone con una pantalla y un teclado separados, haciendo que el teléfono haga las veces de ordenador.

Samsung Electronics tuvo que detener en octubre la fabricación de su producto estrella, el Galaxy Note 7, después de que varios aparatos explotaran o se incendiaran. Sin embargo, este modelo debía competir con el iPhone 7 de su gran rival, el estadounidense Apple.

Samsung, que culpó a las baterías de los teléfonos, tuvo que retirar más de tres millones de aparatos y disculparse con los consumidores. La debacle le costó miles de millones de dólares y manchó su reputación y su credibilidad. “Como saben, este ha sido un año duro para Samsung”, admitió DJ Koh, presidente de la división móvil.