El ‘boom’ de la construcción de carreteras en el Ecuador creó la oportunidad perfecta para que el emprendimiento de José, Hugo, Alejandro y Guillermo Navarrete tuviera resultados en el mercado.

Su empresa STdrive del Ecuador, más reconocida como ST, realiza la instalación de señalización vertical (señales de curvas y señales reguladoras), y tachas; además de encargarse de colocar la pintura reflectiva en las vías.

La Ruta Viva, la av. Simón Bolívar, el puente sobre el río San Pedro, la ruta de acceso del Aeropuerto Mariscal Sucre, en el Distrito Metropolitano son parte de los más de 50 proyectos en los que ha participado esta firma quiteña.

Además de estos servicios, es proveedora de productos para la señalización vial como pintura termoplástica, acrílica, tachas, vinil reflectivo, entre otros. Este sector representa cerca del 70% de su negocio, que en el 2014 facturó cerca de USD 3,8 millones.

Pero este emprendimiento tuvo un inicio singular. “Cuando yo recorría las carreteras, porque soy guía de turismo, no había seguridad vial. Con ello vi una oportunidad de negocio”, señala Alejandro Navarrete, gerente de Marketing y Ventas de la empresa.

Él propuso esta idea a sus tres hermanos y a su padre, Guillermo Navarrete, quienes decidieron apoyar la iniciativa. “Los estudios en investigación de Hugo, los conocimientos de mecánica de nuestro padre y mi experiencia gerencial, aportaron a su idea (Alejandro)”, cuenta José Navarrete, gerente general de STdrive.

Fue así que en el 2009 y con una inversión de USD 10 000, estos emprendedores se ‘arriesgaron’ a colocar chevrones (bandas horizontales sobre el pavimento para evitar excesos de velocidad), y señales verticales en el proyecto de la vía Balbanera - Pallatanga, en la Sierra ecuatoriana.

Consermin fue la responsable del desarrollo de este carretera. Édgar Salas, representante de la constructora, comenta que el profesionalismo fue uno de los aspectos claves para contratar a STdrive. “Lograron completar el proyecto a tiempo y el contrato inicial que teníamos aumentó a los 60 000 dólares”, señala Salas.

En sus primeros tres años este emprendimiento aumentó su nómina de 6 a 30 empleados y su facturación creció un 10%. Pero a pesar de esto debían enfrentar retos. “La pintura muchas veces no tenía el brillo adecuado y además el clima es un factor determinante. No se puede pintar con lluvia, la vía húmeda o con altas temperaturas, por lo que se retrasa nuestro trabajo”, señala el gerente general de este emprendimiento.

Johnny Pesantes, gerente de Operaciones de la Constructora Angos e Hijos, trabaja con ellos desde hace cuatro años. Él considera que a pesar de las condiciones climáticas, la empresa no descuida la calidad de su servicio. “ El clima es un factor determinante que causa retrasos, pero hay que luchar contra este”, señala.

Así también la firma realizó una inversión de USD 500 000, para adquirir una máquina Borum que permite producir pintura termoplástica. “Esta debe calentarse sobre los 200 grados. Al inicio tuvimos algunos imprevistos y en la práctica conseguir los resultados”, indica Hugo Navarrete.

José Otavio, de la Constructora Norberto Odebrecht, indica que participaron en conjunto para la elaboración de la Ruta Viva. Para este proyecto necesitaban que la pintura sea de alta calidad.

Este empresa cuenta con la comercialización de las marcas Swarco para pinturas y microesferas y la marca Apex para tachas. “Nuestro enfoque es ofrecer exclusividad para nuestros clientes”, señala José Navarrete.

Hoy, la instalación de sus productos oscila entre los USD 0,60 a 7, dependiendo del producto que se coloque en la calzada.

El insignia

‘El trabajo en la vía debe ser responsable’

Édgar Curicho. Chofer de cabezal

Cuando estamos en la vía se requiere que tengamos estrictas medidas de seguridad. Es obligatorio utilizar nuestro casco, chaleco reflectivo, gafas y guantes para evitar accidentes. El momento en el que se pinta tenemos personas que controlan el tráfico y que siempre se preocupan que los vehículos sepan que estamos en la carretera. Nunca hemos tenido accidentes en la empresa y eso es porque los supervisores siempre están atentos de nuestro trabajo. En STdrive cuidan de nosotros y nos brindan todos los beneficios, además de capacitación para el manejo de los vehículos. A veces el clima retrasa la entrega de los proyectos; por ejemplo, cuando llueve o hace calor, pero siempre logramos nuestro objetivo que es concluir la obra a tiempo y con excelente calidad.