El fuerte de Jorge Rivadeneira es la elaboración de trompos de madera  y cacho de toro. Su local está ubicado en el sector de San Roque. Foto: Christian Tapia / LÍDERES

El fuerte de Jorge Rivadeneira es la elaboración de trompos de madera y cacho de toro. Su local está ubicado en el sector de San Roque. Foto: Christian Tapia / LÍDERES

En su taller rescata los juegos tradicionales de Quito

5 de junio de 2017 17:45


Trozos de madera, herramientas, tornos son parte de los materiales que se encuentran en el taller de Jorge Rivadeneira, de 86 años de edad.

En la calle Rocafuerte, ubicada en el centro de Quito, se encuentra Rivadeneira, este artesano muestra el trompo que lleva en su bolsillo y lo hace bailar de formas diferentes, cada vez que recibe a un cliente o turista.

Su taller se llama Tecni-torno y se dedica a la elaboración y moldeado de figuras de madera a detalle. Desde los 12 años Rivadeneira empezó a utilizar el torno y otras herramientas para darle forma y moldear la madera.

Él recuerda que los primeros trompos los hacía en un torno manual de su padre. Con su hermano mayor se turnaban para empujar el torno. Una vez terminado el juguete los hermanos salían a vender los trompos a sus compañeros en la escuela.

Ahora, casi ocho décadas después, Rivadeneira es conocido como el Señor Macizo, porque el material con el que elabora los trompos y otros productos son hechos con maderas resistentes como pujín, roble, chanul, guayacán blanco y negro, entre otras.

El artesano aclara que el trompo siempre ha sido elaborado con madera. “Los trompos de plástico no son los tradicionales y no bailan igual”, asegura.

El proceso de creación inicia con la selección de madera, luego se pasa al modelado del trozo de madera en un torno con la ayuda de una punta. Finalmente los lija y los pinta con líneas negras. La identificación del trompo macizo es el ‘sombrero’ que tiene el juguete en su parte superior.

Además de la elaboración de este juego tradicional el emprendedor también enseña a sus clientes a hacer bailar el trompo.

Rivadeneira cuenta que conoce alrededor de 40 formas diferentes de hacerlo: en la mano, en su cabeza, en una cuchara, como el teleférico, entre otras.

Por varios años el trompo ha sido uno de los juegos representativos de Quito, es por eso que varias personas lo compran para llevar a sus hijos o seres queridos en el exterior. Algunas personas se llevan a España , Italia o Estados Unidos.

Para Daniel Silva, uno de los clientes, es importarte que se rescaten las tradiciones y que se siga difundiendo los juegos tradicionales. “No he visto más lugares que elaboren trompos iguales a estos, los precios son asequibles”.

Por otro lado, Andrea Sánchez piensa que es importante rescatar los juegos tradicionales “para poder compartir con nuestros hijos y enseñarles nuestras habilidades”.

Tecni-torno ofrece una variedad de tamaños de trompos: existen desde los miniatura hasta los de 16 centímetros.

De igual forma los costos varían según el tamaño y el tipo de detalles. Los pequeños están desde los USD 3 y los más trabajados pueden costar 85.

Además de la elaboración de trompos, Rivadeneira crea otros juegos tradicionales a base de madera como por ejemplo: baleros, perinolas, entre otros juegos.

También, brinda demostración del baile del trompo a los turistas, en cumpleaños y eventos artísticos. El costo aproximado de una presentación de este artesano una hora bordea los USD 100.