Ligia Abonía muestra algunas de las muñecas de cerámica que representan a mujeres de la cultura afro,  en el centro comercial Multiplaza. Foto. Marcel Bonilla / LÍDERES

Ligia Abonía muestra algunas de las muñecas de cerámica que representan a mujeres de la cultura afro, en el centro comercial Multiplaza. Foto. Marcel Bonilla / LÍDERES

El turista conoce la cultura afro a través de artesanías

5 de diciembre de 2017 19:07

Dos muñecas afros elaboradas con cerámica adornan la vitrina del negocio de Ligia Abonía, una afroesmeraldeña dedicada a elaborar artesanías con temática de esa etnia.

Una réplica de marimba hecha de pambil y una canoa cargada de frutas muestran la abundancia de los productos que se cosechan en las comunidades afro del norte de Esmeraldas. También se pueden apreciar pulseras hechas con conchas y coco, aretes de semillas, réplicas de marimberos, comuneros, bomberos y mujeres cantoras.

Abonía lleva en este negocio 15 años, pero desde hace uno empezó con un trabajo mucho más formal. Obtuvo los permisos que entregan las autoridades para la comercialización de artículos.

En el Ministerio de Industrias ha recibido capacitación sobre cómo proyectar sus ventas, presentación de productos y elaboración de presupuestos.

Otros emprendedores también se han beneficiado, ya que estos proceso son parte de un proyecto de desarrollo artesanal que nació con el objetivo de mostrar la cultura del pueblo afro, a través de réplicas hechas con cerámica y madera, en un centro artesanal.

De esa manera los artesanos de la ciudad se agruparon para acopiar la producción y luego venderla en un sitio donde los turistas concurran cuando estén en a Esmeraldas o Atacames. Abonía la exhibe en Multiplaza Mall.

Para Martha Prías los detalles en la elaboración de las artesanías afro garantizan su compra. Desde hace un año es clienta de Abonía.

La representante del Ministerio de Industrias en Esmeraldas, Gabriela Zambrano, explica que ese negocio es parte del programa denominado ‘Esmeraldas Innova’.

A través de esta iniciativa se impulsa el trabajo que realizan los emprendedores, a los que se les guía para que regularicen su situación y puedan poner su producción en otros mercados con una mejor presentación.

Hermenegildo Rodríguez, parte de los emprendedores de la cultura afro, señala que ellos empezaron con un capital de 25 millones de sucres (USD 1 000 en la actualidad). Luego fueron mejorando la inversión con capital propio hasta tener una base de cerca de 8 000.

Él es antropólogo de profesión y uno de los activistas en la defensa de los derechos del pueblo afro, por eso le es fácil explicar a los turistas sobre el origen de su etnia, mientras los recibe en su tienda.

Uno de los proveedores de las artesanías que venden en diferentes locales es es Jorge Ayala. Abastece con la mitad de la producción que necesitan para que las tiendas permanezcan llenas.

En su taller trabajan dos personas más, que ayudan a elaborar un promedio de 50 piezas grandes y 50 pequeñas durante la semana,. Entre ellas están muñecas para adornar la sala, marimberos, etc.

María Fernanda Chérrez es una de las impulsadoras que apoya a la difusión de las artesanías afros en el centro artesanal. “El proyecto de desarrollo artesanal ha sido una experiencia importante porque nos ha dado la oportunidad a mucha gente para conocer más de la cultura afroesmeraldeña”.

La proyección del negocio es vender el producto en otros mercados del país a través de ferias artesanales y caravanas culturales.