Washington Toaza es un apasionado de la música. Foto: Galo Paguay / LÍDERES

Washington Toaza es un apasionado de la música. Foto: Galo Paguay / LÍDERES

El arte de negociar y los datos, su valor agregado

16 de mayo de 2017 10:53

Con solo 32 años, Washington Toaza se sentó a discutir el Tratado de Libre Comercio con los EE.UU. junto a los grandes equipos de negociadores latinoamericanos, que buscaban cerrar esta alternativa comercial.

Esta experiencia, en el 2006, fue única para este quiteño, ya que ganó la experiencia necesaria para enfrentar los retos, que años después se presentaron en su vida.
El más importante, hoy por hoy, es su actual cargo de presidente y socio de Grupo MerchantBansa, que se dedica al mercado de valores y a la asesoría financiera.

A este cargo llegó después de enfrentarse a los negociadores estadounidenses, colombianos y otros. Ellos tenían una amplia experiencia en materia de inver­siones, finanzas e incluso trató con autores de libros que estudió en la universidad.

Esto le obligó a fortalecer su nivel de preparación y a realizar cambios en su vida. Sus horas de sueño se redujeron a cuatro y sus lecturas principales fueron los tratados internacionales.

Estas acciones no complicaron la vida de este ingeniero co­mercial. Al contrario, lo volvieron una persona más preparada y lista para enfrentarse a cualquier ­negociación.
El ser parte del grupo de negociadores representó un antes y un después en la vida de Toaza. Cuando comenzaron las negociaciones, el hombre sentía un gran compromiso por conseguir un acuerdo.

Pese al tiempo invertido y al estudio demandado por los negociadores ecuatorianos, el tratado con EE.UU. no se concretó. Esto no fue un fracaso para este hombre de retos, por lo que dio la vuelta a la página y continuó con su camino.

Luego de dos años de estas mesas de diálogo, Toaza salió con una experiencia mayor en el ámbito de las inversiones, las finanzas y, sobre todo, con una responsabilidad de trabajar por el país.

Entonces retomó la actividad que le apasiona: el mercado de valores, al que estuvo vinculado desde los 18 años, cuando ingresó a la Bolsa de Valores Quito como pasante. Luego, Toaza ascendió a otros cargos por su talento y conocimientos en el mercado.

Mónica Villagómez, quien fue presidenta del Directorio de la Bolsa de Valores Quito, señala que este quiteño es una persona investigadora y analítica, que apunta a buscar nuevas alternativas para mejorar su trabajo.

Su ‘chispa’ y su personalidad afable son dos de sus fuertes, ya que lo convierten en un hombre con un temperamento agradable y alegre, señala Villagómez.

En esto coinciden sus actuales compañeros de trabajo, con los que maneja una buena relación.

Pablo Espinel, asesor estratégico de Toaza, reconoce que ha aprendido varias cosas del actual presidente del Grupo MB.

En lo profesional, este quiteño es generoso con los conocimientos y tiene una visión moderna de lo que quiere hacer con la empresa. “Tiene una visión amplia para transformar la compañía en una espacio que potencie sus servicios para hacerla más productiva”.

En lo personal, Espinel coincide con Villagómez en que tiene una personalidad agradable y abierta, que permite un acercamiento entre él y sus colaboradores.

En su recorrido por el mercado de valores, las finanzas y las negociaciones, su familia fue uno de los pilares, que le impulsó a salir adelante. Su esposa, quien es contadora y auditora, y sus dos hijos apoyaron en este camino.

Cuando él habla de su familia, varias anécdotas llegan a su mente. Su primer hijo no comparte su pasión hacia los negocios o las finanzas, pero sí es un apasionado de la música.

Y con razón. Cuando Toaza supo que sería papá, el primer regalo que compró fue unas maracas. Además, juntos descubrían más sobre la música. Precisamente, esta es otra de las pasiones de este ingeniero comercial.

En su oficina, ubicada en las avenidas Colón y Amazonas, hay un sinnúmero de instrumentos musicales. Un bongó en la esquina de una sala y unas maracas forman parte de su espacio. La salsa, por ejemplo, alegra su cuerpo y lo invita a bailar, explica entre risas.

Este hombre alegre y apasionado no solo está vinculado a los números o a la Bolsa, también es un apasionado de los libros. Él considera que la lectura es básica para cualquier ser humano, porque vuelve a las personas cultas y con un amplio conocimiento de lo que es la sociedad -dice- citando a su padre, quien inculcó la importancia de la lectura y del estudio.

Los retos para un hombre como Toaza son grandes, en especial en su espacio de trabajo, al que llegó por su capacidad y alegría. Dos cualidades que fortalece a diario y que enseña a su familia y equipo.

Una cartera de 55 clientes a su cargo

El MB Grupo se conforma de las empresas MerchantBansa y MerchantValores, que se dedican a la asesoría financiera y al mercado de valores desde hace 23 años.

Washington Toaza llegó a esta empresas en el 2007, como gerente de Negocios, y participó en proyectos de Banca de Inversión. Hoy por hoy es el presidente ejecutivo y socio del grupo, que tiene 50 clientes nacionales y cinco extranjeros.

La empresa está orientada a la creación de valor para los accionistas o para quienes representan el patrimonio tanto del sector público como del sector privado. “Apuntamos a trabajar con los accionistas para que su rentabilidad mejore o se incremente, por lo que agregamos valor a las empresa”.

La firma considera que agregar valor se consigue con tres pilares: incrementar ingresos, ampliar márgenes o mitigar riesgos. “Con estos tres consejos se lograrán mejorar los ingresos para los inversionistas de las empresas. Lo importante es que ganen todos”, dice Toaza, quien trabaja con un grupo de 10 trabajadores.

Los sectores en los que se desenvuelve el grupo son: mercado de valores, banca, cooperativas, ‘factoring’, seguros, salud, comercial, pesquero, agrícola, automotriz, de consumo masivo, minero, azucarero, hotelero, floricultor, textil, alimentos, construcción, eléctrico, telecomunicaciones.

Desde el 2016, la empresa amplió su portafolio de servicios y apostó por una línea de servicio de consultoría en buenas prácticas de gestión, para lo que integró a su equipo de consultores a profesionales calificados.