Ecuador espera las respuestas de México a las propuestas que entregó para el acceso a ese mercado del camarón y banano.

Julio José Prado, ministro de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca, asegura que el atún ya no es un problema. “Hemos tenido conversaciones entre los sectores privados, las industrias atuneras y pesqueras de México y Ecuador”.

Inicialmente, se propuso tener un anexo de pesca y una de las problemáticas que surgió hace tres o cuatro meses es que el sector pesquero mexicano pedía información muy específica de ciertas zonas de pesca del atún ecuatoriano.

Eso no se puede entregar, porque constituye información crucial para el negocio de la industria nacional. “Dijimos es que ese tipo de información no se entregará y ya está listo el anexo para ser aprobado”.

Aún no se lo ha puesto sobre la mesa, explica Prado, porque están pendientes otros temas, pero “ese es el preacuerdo al que hemos llegado. Estamos alineados el sector pesquero mexicano y ecuatoriano con los equipos negociadores. Ya solo tendremos que ir a la mesa para ratificar ese acuerdo que ya existe”.

En banano y camarón, Prado afirma que Ecuador mantiene y ha entregado una propuesta a México, que básicamente consiste en que se tenga algún tipo de acceso a los dos principales productos de exportación.

La posición de México durante toda la negociación ha sido que no se puede dar acceso de ningún tipo y que las discusiones queden para la Alianza del Pacífico cuando haya una nueva etapa de negociaciones en este acuerdo multilateral.

La posición de Ecuador ha sido siempre tener algún tipo de acceso. El país reconoce que hay sensibilidades desde el lado mexicano y propone un acceso en cuotas o comercializar en ciertos momentos del año. “Son las llamadas cuotas o estacionalidad y esa es la propuesta que hemos entregado formalmente al equipo negociador mexicano”.

Los nuevos diálogos no son una ronda de negociación. La última fue la de Quito y quedó abierta. “No hace falta una nueva ronda, porque todas las mesas, salvo la de acceso a mercados quedó abierta”.

Las 18 mesas se han cerrado e incluso se ha avanzado en los documentos técnico, jurídico y legal. “Cuando tengamos una respuesta de México al banano y camarón tendremos que ratificar todo lo que hemos negociado y básicamente hacer el cierre técnico”.

En la cumbre de la Alianza del Pacífico, que será el 25 de noviembre de 2022 en México, estarán los cuatro presidentes de los países como miembros plenos, pero también asistirán el presidente Guillermo Lasso y el de Costa Rica, que quieren ser parte del bloque. “Nosotros esperamos que antes de la reunión o allá podamos tener una respuesta del equipo negociador mexicano”.

Prado afirma que el presidente Andrés López Obrador “nos ha confirmado que quiere cerrar el acuerdo la última semana de noviembre en la cumbre de la Alianza”.

La voluntad de Ecuador existe, siempre con una línea roja muy clara que es que tiene que ser un acuerdo comercial bien negociado de lado y lado, ratifica el ministro Prado. En el acceso de productos mexicanos a Ecuador “se han medido las sensibilidades, eso está cubierto y muy bien consensuado con el sector productivo de Ecuador”.

Tras la firma del acuerdo, inmediatamente ingresarán más de 5 000 productos al mercado mexicano con cero aranceles. Otras canastas menores tendrán una desgravación que va de 3 a 5 años y, en el peor de los casos, hasta 7 años de plazo.

Se exportará todo tipo de frutas, conservas, enlatados, confites, panadería, textiles y línea blanca; de la industria y manufactura irán ropa, electrodomésticos, partes para la electromecánica y otros.

De la canasta de México llegarán menos de 3 000 productos libres de aranceles, como herramientas, materias primas, maquinaria y fármacos. Otras canastas con mayor sensibilidad como el sector metal mecánico, automotor, baldosas, línea blanca y textiles tendrán una desgravación de 7 a 10 años de plazo.

Xavier Rosero, vicepresidente Ejecutivo de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor), comenta que la expectativa es que ese diálogo a nivel político (de presidentes y ministros en la Alianza del Pacífico) pueda acelerar la respuesta formal que se espera de México a los planteamientos ecuatorianos.

El objetivo es que se incorpore un acceso con condiciones reales para que el banano y camarón puedan entrar a ese mercado.


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