Dos aviones, de las aerolíneas Tame y Avianca, aparecen en la pista del aeropuerto Mariscal Sucre de Quito, la tarde del pasado miércoles 25 de septiembre. Foto: Patricio Terán / LÍDERES

Dos aviones, de las aerolíneas Tame y Avianca, aparecen en la pista del aeropuerto Mariscal Sucre de Quito, la tarde del pasado miércoles 25 de septiembre. Foto: Patricio Terán / LÍDERES

Aerolíneas detectan nuevas oportunidades en rutas locales

30 de septiembre de 2019 12:44

Manta, Coca, Santa Rosa y Loja son destinos que generan interés en las aerolíneas que vuelan dentro de Ecuador. Esas ciudades son vistas por las compañías aéreas como oportunidades para desarrollar más una industria que el año pasado movió 3,1 millones de pasajeros.

Entre los participantes de este mercado se encuentran tres aerolíneas con trayectoria como Latam, Avianca y Tame. A este grupo se acaba de sumar, en agosto pasado, Aeroregional. A estas hay que añadir otras compañías más pequeñas que operan principalmente en la Amazonía y en vuelos no regulares.

Latam y Avianca pertenecen a grupos extranjeros, tienen experiencia, mayor infraestructura y son las líderes en el mercado ecuatoriano de pasajeros. La estatal Tame atraviesa una etapa crítica, con pérdidas por USD 240 millones entre el 2012 y 2017, según datos publicados por diario EL COMERCIO y está por anunciar planes de reestructuración.

Aeroregional, por su parte, recién opera desde agosto en el mercado doméstico con vuelos regulares, aunque ya ofrecía vuelos no regulares domésticos y al extranjero desde mayo y agosto del año pasado.

Ahora estas aerolíneas desarrollan planes comerciales dentro del país, lo que incluye nuevas rutas, generación de puestos de trabajo e inversiones.

Latam, por ejemplo, acaba de anunciar hace dos semanas que empezará a volar desde Quito hacia Manta, Coca y Santa Rosa. Los vuelos a Manta se iniciarán en noviembre; mientras que los vuelos a Coca y Santa Rosa se alistan para el primer semestre del 2020.

Daniel Leng, director Ejecutivo de Latam Ecuador, dice que a Manta se calcula trasportar unos 30 000 pasajeros por año, al Coca 50 000 y a Santa Rosa 20 000. “Manta y Coca tienen más potencial. La primera ciudad se destaca por ser un destino turístico y por el segmento corporativo”. Coca, en cambio, tiene la ventaja de estar cerca de ‘lodges’ adonde viajan muchos extranjeros que requieren puntualidad y calidad.

Para Leng, el mercado más difícil de desarrollar será Santa Rosa. “Si bien hay negocios y pasajeros corporativos, la demanda es menor y la idea es desarrollar y lograr una oferta estable”. Según Leng, la aerolínea tiene hoy en día el 35% del mercado doméstico.

Además la aerolínea anuncia una inversión de más de USD 80 millones para cubrir las rutas mencionadas; generará empleo con más de 300 nuevas plazas de trabajo directos e indirectos.

María Beatriz González, gerenta Comercial de Avianca en Ecuador, califica al 2019 como un buen año. La aerolínea vuela a Quito, Guayaquil, Manta, Coca, Baltra y San Cristóbal y este año ha prestado especial interés en consolidar las ventas en línea, “porque el consumidor quiere más opciones y nuevos servicios”. Según González, las ventas en línea han crecido 18% frente al año pasado.

La aerolínea acaba de presentar la semana pasada la tarifa personalizada, para que el cliente compre sus pasajes en función de su economía y necesidades. Además, incrementó una frecuencia entre Quito y Guayaquil.

La aerolínea estatal Tame opera hoy en día entre Quito, Guayaquil, Coca, Lago Agrio, Cuenca, Loja, Baltra, San Cristóbal, Esmeraldas, Manta y Santa Rosa. También vuela en 15 destinos de la Amazonía, como Tiputini, Shell, Coca, entre otros destinos.

Ante la competencia que viene creciendo en rutas donde opera, la aerolínea ecuatoriana dice que en un mercado tan dinámico como el aeronáutico es natural el ingreso de competidores nuevos. “Todo operador nuevo representa oportunidades para mejorar nuestra estrategia, nuestra red y enfoque de negocio para afrontar y convivir con la competencia”.

El actor más reciente de este negocio es Aeroregional, con base en Cuenca y que opera desde inicios del mes pasado con vuelos en las rutas Quito-Guayaquil y Cuenca -Quito. En este tiempo la ocupación viene creciendo con cada vuelo y hoy está en el 35%, en aviones para 129 pasajeros.

Carolina Flores, gerenta Comercial, dice que el objetivo de la compañía es llegar a una ocupación de 60% hasta finales de año. La ejecutiva cuenta que desde octubre la compañía volará entre Quito y Santa Rosa; además ya tiene planes para volar desde la capital ecuatoriana hacia Loja y Coca. “Hemos hecho la solicitud respectiva a las autoridades y ahora estamos a la espera de la certificación”.

Los voceros de Latam, Avianca y Aeroregional coinciden en que el mercado ecuatoriano todavía presenta oportunidades para crecer. Daniel Leng, de Latam, dice que cuando la competencia está debilitada por distintos motivos, “hay una oportunidad para quienes empezamos una transformación hace cinco años. Es un asunto de decisiones anticipadas que nos permiten afianzar nuestra posición en el mercado”.

La gerenta Comercial de Avianca coincide e indica que siempre existen oportunidades. Desde su punto de vista, si una aerolínea no sirve adecuadamente a un destino, las preferencias del mercado irán hacia la empresa que sí cumple y sirve al mercado.

En Aeroregional también se siente optimismo. Su vocera, Carolina Flores, dice que el objetivo es crecer en el mercado doméstico de manera responsable. “Somos respetuosos de los competidores y conocemos nuestras fortalezas. Por eso trabajamos para ser una alternativa”.

El tamaño del mercado es el principal desafío


Redacción Quito (I)
redaccion@revistalideres.ec

El mercado aéreo local es limitado. Hasta hace apenas dos meses solo era operado por tres aerolíneas: la estatal Tame y las internacionales Avianca y Latam.

La falta de competencia ha generado, como consecuencia, un alto costo en los boletos aéreos, explica Nicolás Larenas, analista en temas aeronáuticos.

Él atribuye la realidad del mercado a dos factores principales: ser un país pequeño, donde los vuelos son muy cortos, y una economía “compleja y débil”.

Las cortas distancias que tienen que recorrer los aviones, disminuye los tiempos para el mantenimiento de los aviones, lo que genera altos costos operativos, explica el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP).

A esto se suma que en los últimos cinco años las empresas aéreas cerraron algunas rutas. Tame, por ejemplo, dejó de volar hacia Salinas, Macas, Tena, Tulcán y Latacunga. Actualmente presta su servicio hacia 11 destinos.

Mientras tanto, Avianca suspendió la ruta hacia Cuenca y Latam hacia Manta, aunque esta última la retomará en noviembre.

El cierre de rutas, señala Larenas, estuvo vinculado con la difícil situación que ha atravesado Tame en los años recientes y el cambio de aeropuerto en Quito, que en un principio impactó en la ocupación de los vuelos, por la falta de vías óptimas para trasladarse al aeropuerto.

El principal problema de la aerolínea estatal es que no ha alcanzado rentabilidad. Por ello, decidió cerrar rutas internacionales que se volvieron muy costosas o estaban generándole pérdidas.

“En el 2019, el enfoque empresarial de Tame ha sido fortalecer el mercado doméstico, suspendiendo algunas rutas internacionales, mejorando producto corporativo y fortaleciendo oferta a destinos como Galápagos, Cuenca, Coca y Quito”, explica la empresa, que actualmente está operando con siete aviones, de los cuales uno se encuentra en mantenimiento.

Para reducir gastos, la firma también se encuentra en un proceso de devolución de aeronaves arrendadas. Este año devolvió dos Airbus (A330 y A320) y está en proceso de entregar otro A320 y un Embraer E190.

Además, en concordancia con una política de austeridad del Gobierno, en lo que va de año ha desvinculado a 232 personas. Al momento tiene 1 131 trabajadores.

Ante las limitaciones actuales del mercado, explica el MTOP, el objetivo del Gobierno es incrementar la oferta de asientos mediante la colaboración de la empresa privada. La entidad añade que se espera que con esto se impulse la competitividad y se logre una reducción estructural de los pasajes aéreos.

Para el primer semestre del próximo año se espera que Latam comience a volar hacia las ciudades de Santa Rosa y Coca, tras un acuerdo firmado con el Gobierno.

En 2018, la aerolínea chilena, que opera en cinco destinos, transportó a 1 800 000 pasajeros dentro del país y para este año espera un crecimiento del 4%, indica Daniel Leng, director ejecutivo de Latam Ecuador. Por su parte, la colombiana Avianca transportó a 556 000 pasajeros en las seis rutas que mantiene operativas, detalla María Beatriz González, gerenta Comercial de Avianca, quien reconoció las oportunidades que ofrece el mercado, a pesar de la difícil situación económica.

Una de las fortalezas del mercado aéreo en el país, subraya el Ministerio de Transporte y Obras Públicas, es que cuenta con una red aeroportuaria renovada, “que garantiza que las operaciones se efectúen con seguridad”.

Para Larenas, el país requiere de una política aerocomercial, en la que se promueva la inversión privada y se acabe el proteccionismo. Además, considera necesaria una revisión de tasas e impuestos.