Mujeres de la comunidad de  Pucará, en A. Ante, siembran semillas que pasaron una noche bajo la Luna. Foto: Francisco Flores para LÍDERES

Mujeres de la comunidad de Pucará, en A. Ante, siembran semillas que pasaron una noche bajo la Luna. Foto: Francisco Flores para LÍDERES

En el agro se aplican los saberes ancestrales

29 de diciembre de 2016 15:21

Para los indígenas kichwas, el pasado 21 de diciembre inició el Kapak Raymi (Fiesta de la Sabiduría, en español). El ciclo se extiende hasta marzo próximo, explica Shayri Quimbo, estudioso de esta cultura originaria.

La festividad andina coincide con el ciclo agrícola del maíz. “Desde este mes los sembradíos, que fueron plantados en septiembre, empiezan a crecer hasta alcanzar la maduración”.
Para campesinas como Zoila Sandoval, de la comuna de Zuleta situada en el suroriente de Ibarra, esta es una época para arrancar la maleza que se cría entres los plantíos. Comenta que su abuelo, Federico Alvear, le explicaba que entre la naturaleza y +el hombre hay un nexo permanente.

Se trata de una creencia parecida a la que tiene Delia Caguano, presidenta nacional del Consejo Ciudadano Sectorial del Ministerio de Agricultura (Magap).

Caguano, oriunda de Chimborazo, asegura que en las comunidades hay sabiduría que debería ser compartida. Ese, precisamente, fue el objetivo del Encuentro de Saberes Ancestrales, que se realizó el 8 de diciembre pasado, en Cotacachi, Imbabura. La iniciativa nació desde las mujeres del Consejo Ciudadano Sectorial y la Unión de Organizaciones Campesinas de Cotacachi (Unorcac).

Líderes kichwas expusieron temas de la cosmovisión andina, como las fiestas del calendario andino, el calendario lunar en las prácticas agrarias y la cosmogonía de los pueblos ancestrales, entre otros.

Alfonso Morales, líder de la Unorcac, comentaba que antes los padres recomendaban no trabajar los domingo ni los lunes; tampoco sembrar, porque las semillas se comerían los pájaros.

También, explicó que en un esfuerzo por reencontrarse con los saberes ancestrales, la Unorcac elabora un calendario lunar cada año. La idea es que las nuevas generaciones recuperen los conocimientos sobre fases ideales para la preparación de la tierra, siembra y cosecha. En el encuentro, en el que participaron varios pueblos, se resaltó la práctica de guardar las semillas como una estrategia de seguridad alimentaria.

Según Morales, en Cotacachi se rescató 12 especies de maíz de las 29 que hay en el Ecuador gracias a las prácticas milenarias. Una de ellas que no está desligada de la actividad agrícola, en la tradición kichwa, es realizar rituales de agradecimiento a la Pachamama (Madre Tierra, en español).

Narciza Pupiales, nativa de San Clemente, Ibarra, tiene una especie de altar en honor a la naturaleza en el medio de su huerto. Con una vela, flores y semillas realiza las ofrendas. El investigador Ramti Chuma asegura que cuando entierran las semillas, se hace un homenaje a los abuelos.