La iniciativa amazónica, de Esthela Nonteno, se desarrolla en la comunidad Asociación Domingo Calapucha (Sucumbíos) donde está la pequeña fábrica semiartesanal. Foto: cortesía: ©JoelHeim/WWF-Ecuador

La iniciativa amazónica, de Esthela Nonteno, se desarrolla en la comunidad Asociación Domingo Calapucha (Sucumbíos) donde está la pequeña fábrica semiartesanal.Foto: cortesía: ©JoelHeim/WWF-Ecuador

Andi Wayusa está en las tiendas y supermercados de Sucumbíos

26 de enero de 2022 16:56

En la Amazonía, la bebida de la guayusa es un ritual en cada amanecer de los habitantes de las comunidades. La consumen como un té para tener energía todo el día, ser fuertes y así trabajar el campo.

Pensando en esa ancestralidad y en que es un producto natural, Esthela Nonteno y su familia crearon su bebida energética, bajo la marca Andi Wayusa. Esta bebida se produce con la hoja de la planta (un árbol mediano) de la guayusa.

El producto se ofrece en botellas de vidrio de 300ml y 475ml desde febrero del año pasado, mientras que en botellas de plástico tienen de 500 ml y de un litro. Adicionalmente, venden hojas de guayusa y flor de jamaica deshidratadas.

Su público objetivo son los deportistas y adultos, pero quieren llegar a otro tipo de clientes, como los niños y los más jóvenes.

Para conquistarlos con el sabor desarrollan bebidas de guayusa con flor de jamaica y con maracuyá. Nonteno cuenta que los niños y jóvenes no consumían la bebida, porque no les agradaba el sabor natural. “La reacción ha sido positiva y ya tenemos clientes en ese segmento”. Los dos sabores están en el mercado hace seis meses.

Tanto las bebidas como los productos deshidratados se venden en la ciudad de Lago Agrio, en la provincia de Sucumbíos. La proyección es expandirse a ese territorio y al mercado nacional. Además, están en el proceso de crear té de guayusa en fundas para la exportación a EE.UU. e Italia.

Desde inicios de 2021 empezaron las ventas en los supermercados locales, algunos puntos turísticos y parques de la ciudad, así como en un local de la terminal terrestre, bajo la marca Hecho en Sucumbíos, donde están más de 32 emprendedores de la provincia. Todos ellos pagan por el arriendo de este espacio para promocionar sus productos, ya que es una zona con mucha afluencia por los viajeros.

Su iniciativa nació en el confinamiento de la pandemia y ante la falta de empleo. Ella, su padre, unos amigos de Estados Unidos -que conoció cuando ella estudiaba allá- y de Italia invirtieron USD 10 000 para comenzar este emprendimiento familiar.

La llegada del covid cambió el estilo de vida de las personas en su entorno, comenta. A medida que se reactivaban las actividades, las personas querían consumir bebidas y alimentos naturales.

Bajo esa premisa pensó que la bebida de la guayusa era una opción. La producción comenzó en junio de 2020 de forma artesanal y se envasaba en botellas de plástico. Se vendían bajo pedido, sobre todo a las personas que practicaban deportes cuando se autorizaron las actividades físicas en los gimnasios y en las oficinas de las empresas y entidades públicas.

Empezaron a probar el mercado durante dos meses: comercializaban 150 botellas cada semana.
Mientras Andi Wayusa iba gustando a los consumidores, se tramitaba el registro sanitario, que se obtuvo en diciembre de ese año.

En esos seis meses consiguieron un local, compraron maquinaria (semiartesanal), mesas, lavamanos y se aplicaron medidas sanitarias y de bioseguridad. Laboran cuatro personas, incluida Nonteno, quien está por graduarse en Administración de Empresas en la Universidad Técnica Particular de Loja.

En este momento se distribuyen de 1 800 a 2 000 botellas mensuales, pero los planes son tener una mejor maquinaria para aumentar la producción y atender la demanda.

Para ello, reciben apoyo del programa Amazonía Indígena Derechos y Recursos (AIRR), que arrancó en octubre de 2020, con el propósito de apoyar a seis emprendimientos de esta región, incluido Andi Wayusa. El proyecto es del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), NESsT de Perú y la Confederación de Nacionalidades Indígenas de la Amazonía Ecuatoriana (Confeniae).

El financiamiento proviene de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid), que aporta con USD 700 000 para trabajar en los varios enfoques del programa de apoyo para Andi Wayusa y cinco emprendimientos más que están en AIRR.

A través de este plan son capacitados en varias áreas, como contabilidad, organización, se creará una página web de Andi Wayusa, se hará el rediseño de la marca y conocerán temas sobre derechos. También, esperan conseguir maquinaria semiindustrial, para reducir los costos de operación y ser más competitivos, dice Nonteno.

Este emprendimiento, además, es parte del programa Proamazonía Innova, que los ayudará a mejorar el producto y les dotarán de equipamiento.

La hoja de guayusa se compra a los socios de la Federación de las Nacionalidades Kichwas Ecuador, de la cual Nonteno es parte, con su comunidad Asociación Domingo Calapucha.