Una herramienta tanto para hombres como para mujeres es el cepillo Oral B Genius 9000.

Una herramienta tanto para hombres como para mujeres es el cepillo Oral B Genius 9000.

Los aparatos tecnológicos son parte del tocador

23 de agosto de 2016 16:24

Los artefactos de aseo son cada vez más prácticos e incluso, gracias a la tecnología, entran en el territorio de los productos inteligentes.

Estos equipos pertenecen a una nueva generación. Son diseñados para ofrecer calidad y duración. Además, su diseño minimalista y enmarcado en el estilo tecnológico hace que los usuarios se sientan en el futuro. Las últimas innovaciones tecnológicas presentan un diseño mejorado, que significa mejores resultados y menos horas frente al espejo.

Para secarse el cabello ya no hacen falta los grandes y ruidosos aparatos apuntando la cabeza. Dyson Supersonic Hairdryer es una secadora ligera, con control de temperatura sensible para prevenir daños por el calor. Además, es ocho veces más rápida que las secadoras comunes.

La Philips OneBlade es una navaja diseñada específicamente para estilizar la barba. No para rasurar ni para cortar. La cabeza tiene cuatro peinillas ‘clip-on’ que hacen de esta, una navaja de precisión. Aunque es fácil de usar, las navajas de repuesto tienen un precio de unos USD 13.

Si de recortar la barba se trata, la Braun Beard Trimmer BT5050 ha sido aplaudida por los críticos, pues la vida de la batería es larga: puede ser usada en seco o en húmedo y es fácil de limpiar. Tiene dos niveles y logra un acabado uniforme, sin espacios cortados de forma irregular.

Una herramienta tanto para hombres como para mujeres es el cepillo Oral B Genius 9000. Este aparato se conecta al ‘smartphone’ a través de una aplicación. Usando reconocimiento facial, el cepillo hace un plano de la boca para controlar que cada rincón sea limpiado apropiadamente.

Otra curiosidad entre los ‘gadgets’ para el cuidado facial es el Face Gym Pro. Este aparato usa estimulación eléctrica para los músculos, es decir es una máquina de ejercicio para las miles de fibras musculares en el rostro. Es un tratamiento profesional, pero de uso casero.