Los ‘scooters’ eléctricos son una de las opciones de movilidad que ofrece este emprendimiento. Foto: Cortesía

Los ‘scooters’ eléctricos son una de las opciones de movilidad que ofrece este emprendimiento. Foto: Cortesía

La ‘start up’ premiada por enfocarse en la movilidad

2 de marzo de 2020 08:26

Bicicletas y ‘scooters’ eléctricos, así como taxis y buses, se integran en las soluciones de movilidad que ofrece la ‘start up’ lojana Kradac. Este emprendimiento nació en el 2015 y en este tiempo se ha enfocado en mejorar el transporte ciudadano, utilizando las nuevas tecnologías.

El más reciente producto se llama Clipp y está en el mercado desde hace un año. Se trata de un plan de movilidad que utiliza el concepto ‘mobility as a service’ o movilidad como un servicio. Este permite que una persona utilice distintos medios de transporte bajo una sola plataforma.

Así, una persona que se moviliza desde su casa hasta su oficina, por ejemplo, puede usar primero una bicicleta hasta una estación de transporte público. Allí toma un bus y luego termina su trayecto utilizando un taxi o un ‘scooter’ eléctrico. Para esto utiliza un plan de movilidad que cuesta USD 30 y que le permite utilizar, cada mes, cinco viajes en taxi, así como viajes ilimitados en bus, en bicicleta o en ‘scooter’, tan de moda hoy.

En Loja ya se cuentan en la actualidad 50 personas que tienen este plan, explica Bruno Valarezo, gerente General de Kradac. “Con este sistema el usuario puede conocer opciones de transporte cercanas a su ubicación y elegir la mejor alternativa. Para esto analizamos tiempo, precio y sostenibilidad ambiental”, explica entusiasmado Valarezo en entrevista telefónica con LÍDERES.

Gracias a Clipp, Kradac fue premiada en enero pasado en el congreso Latam Mobility 2020 que este año se cumplió en Ciudad de México “por su contribución a la innovación”. Este certamen agrupa a emprendimientos enfocados en la movilidad dentro de las ciudades. A ese reconocimiento se suman otros obtenidos por la ‘start up’ en Colombia y Ecuador, en los últimos años.

Antes de desarrollar Clipp, este emprendimiento ecuatoriano sumó experiencia, con aprendizajes y errores. La primera solución que desarrolló -en el 2015- fue Ktaxi, un aplicativo que permite solicitar taxi. Valarezo recuerda que fue un trabajo retador.
“Al inicio trabajamos con radiotaxis, lo que significaba que el taxista no necesitaba un aplicativo móvil. Usamos el radio para el despacho de carreras, lo que nos permitió trabajar con tres o cuatro operadoras de radio taxi con 200 unidades disponibles”. Hoy trabajan con 6 000 taxis legales.
Uno de los mayores desafíos fue negociar con las operadoras y ellos con los taxis. Era 2016 y tomó unos cuatro meses de conversaciones, de demostraciones, de sentase a discutir términos y empezar a operar, cuenta Valarezo.

Diego González, conductor de la cooperativa de taxis La Argelia, trabaja con Ktaxi desde hace cuatro años y destaca que se trata de una herramienta ágil y que ofrece seguridad tanto al pasajero como al conductor. “Me ha ido muy bien y los clientes están muy satisfechos por el servicio”.

Este taxista de 33 años toma entre 15 y 20 carreras diarias a través de la aplicación móvil.
Una vez que el sistema se consolidó en Loja vino un salto. Ktaxi evolucionó a ‘delivery’, transporte de carga, movilidad corporativa y pagos de movilidad con tarjetas de crédito o débito. El sistema se expandió y ahora se usa en ciudades como Loja, Machala, Cuenca, Riobamba, Ambato, Latacunga, Quevedo, Manta, Quito Guayaquil, Ibarra, Tulcán, Santo Domingo, entre otras. “Día a día ayudamos a movilizar a 30 000 personas y desde el 2016 hemos gestionado 18 millones de viajes”, cuenta Valarezo.

A esto se suma el hecho de que Kradac también ofrece estos servicios en México, Colombia, Perú y Bolivia. La internacionalización se dio gracias a personas que conocieron de sus servicios en Ecuador.

Otro de los puntos de atención de la ‘start up’ está en los parqueaderos. Hoy también digitaliza plazas de parqueo con las tecnologías disponibles.

La incubadora Impaqto ofreció mentoría al equipo de Kradac. Daniela Peralvo, cofundadora de Impaqto, señala que lo hecho por la ‘start up’ es un gran trabajo. “Han desarrollado las soluciones entendiendo los problemas. Son un gran ejemplo de una solución que ha tenido que crecer sin apoyo, pero con un modelo de negocio validado desde el día cero”.