Hacer compras en línea en tiendas de Estados Unidos y que un viajero certificado lleve los productos hacia Ecuador o Colombia es la oferta de la aplicación Shappi. Fue creada en 2018 por la cuencana Karla Valdivieso. Su concepto de funcionamiento es similar a Uber o AirBnb.
Es decir, las personas hacen sus compras y un usuario registrado como viajero en la plataforma renta el espacio disponible en su maleta para retirar el producto de las tiendas y traerlo al país.

Este emprendimiento tecnológico nació bajo el nombre de Kargoo y evolucionó en los últimos dos años, hasta que en agosto pasado recibió USD 1 000 000 como capital semilla para su expansión hacia otros países de la región.

En la actualidad, la empresa involucró más tecnología y cambió su nombre a Shappi. La idea de negocio nació cuando Valdiviezo, quien reside actualmente en California, viajó hacia Estados Unidos por temas laborales.

Allí, aprovechó para ofrecer por redes sociales el espacio que le sobraba en una maleta para traer encargos, cobrando por peso o tipo de artículo. Luego de eso, desarrolló esta plataforma tecnológica, que cuenta con más de 20 000 usuarios registrados, entre compradores y viajeros.
Actualmente, se notifican cada mes unos 1 000 productos para envíos. Hasta el momento han logrado obtener más de USD 3 millones en productos solicitados.

La aplicación está conectada con ocho tiendas estadounidenses, entre otras Amazon y Walmart, a las que los compradores acceden desde la aplicación para seleccionar el producto deseado, el cual se registra automáticamente en la plataforma como encargo.

El costo del envío es variable y se define de acuerdo con el volumen, peso o categoría de producto. Un porcentaje del pago es para la aplicación y otro para el viajero.
Valdivieso, CEO&Founder de Shappi, sostiene que la aplicación está pensada para que los viajeros registrados puedan obtener ingresos extras. En promedio, los viajeros ganan alrededor de USD 200 por viaje; lo máximo que ha ganado alguien rondaba los USD 600, lo cual es suficiente para pagar, al menos, los pasajes de avión.

Durante este mes, la empresa cambió su nombre a Shappi (shipping & happines) con el objetivo de brindar a los clientes “un momento de felicidad cuando reciben sus compras”.

Valdivieso comenta que la nueva imagen dará a los compradores varios beneficios para que sus compras sean más amigables y seguras, pues conocerán en tiempo real el estado de sus productos.

La nueva versión permite a los compradores hacer sus pedidos en diferentes tiendas y el algoritmo de la aplicación las asigna a un mismo viajero, por lo que los productos llegarán a través de una sola persona en Ecuador.

Otro de los cambios es la implementación de un espacio para saber cuál es el estado de la compra y en dónde se encuentra antes de la llegada al destino final. Eso implica, según Valdivieso, que una vez que el comprador pide los productos de la tienda y paga por el ‘delivery service’, la ‘app’ conecta ese momento con un viajero calificado que traerá los productos desde el exterior hasta el país. “En Ecuador, la empresa se encarga de recoger el pedido de manos del viajero y lo entrega en el domicilio del cliente, sin costos adicionales”.

En mayo pasado, la startup ingresó al programa de aceleración Yellow de Snap Inc., y recientemente participó en una ronda de negocios que le permitió acceder a USD 1 000 000 que recibió como capital semilla.

La ronda fue liderada por Sixers Innovation Lab y Concrete Rose Capital, con la participación de Lightspeed Scout Fund, Iterative Venture y Gaingels. Esto eleva el total recaudado por la empresa hasta ahora a USD 1,2 millones.
Con estos fondos se busca expandir el negocio hacia otros países de Latinoamérica. Asimismo, se invertirá en más tecnología y se ampliará el equipo de trabajo. Actualmente, cuentan con 12 trabajadores y se hacen entregas en Ecuador y Colombia.

El principal objetivo del emprendimiento es cambiar la forma de la logística internacional y que las personas no tengan que preocuparse de cómo van a adquirir los productos, sino que “sea tan fácil como pedir un Uber”.