Andrés Mesías, el propietario de ElectroBike, en su local ubicado en el norte de Quito. Foto: Diego Pallero /LÍDERES

Andrés Mesías, el propietario de ElectroBike, en su local ubicado en el norte de Quito. Foto: Diego Pallero /LÍDERES

La bicicleta eléctrica busca calles en el país

14 de diciembre de 2016 10:54

Una bicicleta busca convertirse en la alternativa definitiva y preferida de transporte público en las urbes.

Definitiva porque busca poner fin a los ‘peros’ que suele poner el usuario que busca movilizarse de su casa al trabajo: llegar cansado y transpirado a la oficina, o que el viaje se convierta en una misión imposible en ciudades con pendientes demasiado pronunciadas.
La solución es una bicicleta eléctrica que le permita al usuario transportarse con mayor confort y menor esfuerzo: tramos complicados o que requieran de mayor rapidez se podrán recorrer con la ayuda de un motor y cuando el usuario desee podrá también mover las dos ruedas con los pedales.

Esta es la propuesta de ElectroBike Ecuador, un negocio que abrió sus puertas hace un mes, en Quito.

Andrés Mesías, su fundador, cuenta que es una franquicia de origen mexicano y que busca plantear soluciones en temas de movilidad.

Mesías cuenta que la propuesta nació en Ciudad de México. Debido a los problemas de movilidad que posee la urbe azteca la firma ElectroBike buscó crear una solución de transporte eficiente y también de bajo costo para los ciudadanos.

El emprendedor creyó que también en Quito sería una buena propuesta debido a la topografía de la ciudad. No obstante, debido a los aranceles, Mesías se topó con el primer obstáculo para desarrollar su negocio en el país.

En junio de este año tenían previsto que se importaran las primeras bicicletas debido a que se esperaba que la medida de los aranceles concluya.

Sin embargo, pese a que todavía no se ha levantado la medida, el emprendedor decidió iniciar su negocio.

Los precios de las bicicletas en el país oscilan entre los USD 800 y 1 790. La bicicleta posee una batería que se carga durante cinco horas y que brinda una autonomía de unos 40 kilómetros.

Por eso, dice Mesías, buscaron un producto económico y de buena calidad, y ElectroBike ofrecía esas características.

Para iniciar el negocio, sostiene el emprendedor, invirtió alrededor de USD 200 000, que incluye la importación de un contenedor con 300 bicicletas y adquirir la franquicia (licencia y capacitaciones) y la adecuación del local comercial en el norte de la ciudad.

Pese al corto tiempo en el mercado, sostiene Mesías, ha logrado vender 100 unidades: 50 fueron a Loja para una firma privada que ofrece el servicio de Ciclopaseo y alquiler de bicicletas.

Además, han realizado otras ventas pequeñas a pymes que están desarrollando su servicio de entrega a domicilio. Y finalmente clientes finales que buscan una alternativa de movilidad.

Al día, dice el propietario de ElectroBike Ecuador registran entre siete u ocho ventas de unidades. Actualmente, las ventas ascienden a USD 80 000 al mes.

Andrés Machuca, emprendedor social, compró una bicicleta de ElectroBike hace unas tres semanas.

Él adquirió el artículo porque que piensa que es una buena alternativa de movilidad en la ciudad. Machuca cuenta que carga la batería cada dos días, durante cinco horas, y con ello es suficiente para transportarse desde su casa hasta su trabajo, en el norte de Quito.