Redaccción Guayaquil
Descrición
¿Te sirvió esta noticia?:
Si 0
No 0

En la búsqueda de la armonía perfecta

Entre el trabajo y la vida personal debe existir un equilibrio. No obstante, los colaboradores, comúnmente, no mantienen la armonía perfecta entre ambas actividades.

En Ecuador, según el Código Laboral, una persona debe trabajar 40 horas a la semana, un promedio de ocho horas durante cinco días. Según los especialistas, este es el tiempo recomendando para que una persona pueda dedicar tiempo a sus actividades fuera del trabajo.

Sin embargo, frecuentemente los empleados se ven obligados a cumplir con horarios extras al día y los fines de semana, lo que reduce el tiempo para pasar en familia, tener 'vida social' o practicar alguna actividad de entretenimiento.

Iván V. labora en una pequeña empresa privada. Él tiene que realizar el trabajo contable de la empresa y muchas veces suele quedarse hasta las 20:00 para cumplir sus responsabilidades. Eso lo hace, al menos, dos veces por semana. Eso reduce su tiempo de compartir con sus hijos o de visitar a sus amistades.

El fin de semana Iván V. no trabaja, y aprovecha para jugar con su hijo mayor, aunque -según confiesa- la mayoría del tiempo prefiere dormir. A él le gusta el fútbol, pero siempre responde con un "no tengo tiempo, estoy cansado" cuando sus amigos lo invitan a jugar.

El cansancio por la elevada actividad laboral se refleja en todos los ámbitos de la vida de una persona. Walter Espinoza, psicólogo y especialista en Recursos Humanos, comenta que frecuentemente es la pareja y luego los hijos quienes se ven desplazados por el trabajo. Lo que conlleva estrés y otras consecuencias.

Para Espinoza debe existir una correcta organización y delimitación de los horarios. "Se debe definir que ninguna actividad interfiera en la otra; en el caso de que esto se produzca, se debe tratar de recuperar el tiempo perdido y siempre recordar que hay que dar prioridad a la familia y a recuperar las energías".

El especialista acota que este comportamiento es común en los mandos medios y altos. Esto, por las responsabilidades que tienen y la mayor presión para cumplir su trabajo, lo que les exige pasar más tiempo en el ambiente laboral.

Un estudio realizado por la firma Regus, en enero de este año, sobre el equilibrio entre la vida personal y el trabajo, ubica al Ecuador en el puesto número 8 con 125 puntos, cinco números encima del promedio mundial. Estados Unidos obtuvo 117 puntos. En la región, destacó Colombia con 152.

El informe señala que los profesionales creen que el equilibrio sí puede ser alcanzado. Otro informe de la consultora de gestión Accenture publicado en marzo de este año, y llevado a cabo a nivel mundial, destaca que más de dos tercios de los encuestados pensaban que podían conseguir un equilibrio.

Pasar más tiempo en el trabajo no es sinónimo de eficiencia, muchas veces esto deriva en conflictos internos que afectan otros entornos de la vida.

Las grandes firmas en el país cuentan con gimnasios dentro de sus instalaciones u ofrecen alternativas de recreación que el colaborador puede usar para su beneficio y lograr mantener una armonía constante en sus actividades. Lo importante es que las personas mantengan un espacio en el que se tomen en cuenta las necesidades individuales.

El equilibrio ante todo

Administrar el tiempo.  Debe fijar un horario para cada actividad. Separar el trabajo de la vida personal.

Sumar actividades. Es importante contar con una actividad diaria paralela al trabajo como ir al gimnasio.

Evitar los problemas. Es necesario resolver los conflictos familiares, de pareja o económicos para no afectar el trabajo.