Los directivos de Canandé trabajan en la obtención de pasta, miel, vino, jaleas, etc., hechas con el cacao. Fotos: Marcel Bonilla / LÍDERES

Los directivos de Canandé trabajan en la obtención de pasta, miel, vino, jaleas, etc., hechas con el cacao. Fotos: Marcel Bonilla / LÍDERES

Cacao que destaca la vida de los chachis

15 de febrero de 2017 12:19

Un estante construido con caña guadúa y decorado con plantas de cacao sirve para exhibir los productos derivados del grano con la marca Canandé.

En unas 80 mil envolturas se lee la marca del producto. Se encuentran en la bodega de la empresa Lilkims S.A., que opera en Esmeraldas fabricando pasta de cacao desde hace seis meses.

El origen del nombre del sello guarda relación con la población chachi de Canandé, dedicada al cultivo de cientos de hectáreas de cacao en Quinindé, centro de la provincia de Esmeraldas.
Esta empresa esmeraldeña se dedica a elaborar barras 100% de cacao fino de aroma. Se venden en el mercado esmeraldeño a través de ocho tiendas a USD 3,65.

La iniciativa de crear una empresa cacaotera surgió hace tres años del gerente propietario de la firma, Mario Guevara. Después de diferentes procesos legales, hace seis meses comercializan su producto en el mercado local.

La inversión inicial fue de USD 20 000. El monto se consiguió a través de créditos de la banca estatal y privada, que apoya iniciativas productivas de esta naturaleza en la provincia de Esmeraldas.

Con esos recursos se logró montar una fábrica artesanal para la elaboración de la barra de cacao fino de aroma, en las afueras de la ciudad de Esmeraldas. Se vinculó a los productores de cacao de la comunidad de Timbre, ofreciéndoles cancelar un mejor precio por la pepa dentro de la mazorca.

De acuerdo con la Mesa de Cacao de Esmeraldas, unos 18 000 productores viven en la provincia de esa actividad. Uno de ellos es Libio Véliz, quien vende su producción a la empresa Lilkims S.A., porque garantiza buenos precios.

En estos primeros seis meses de producción se ha trabajado en el posicionamiento de la marca Canandé. Una cadena de productos de consumo, que abrió sus puertas en la ciudad, compra el 80% de la producción de Canandé.

En Esmeraldas se trabaja en el impulso de la marca con la ayuda de 10 personas. Ellos están llevando la propuesta a otras provincias del país para ampliar el mercado en Quito y Guayaquil.

“Esta es una empresa esmeraldeña que no solo presenta la materia prima, sino que ha empezado a dar valor agregado al producto”, dice Roxana Benítez, directora de emprendimiento de la Universidad Católica de Esmeraldas.

Alfredo Santillán, responsable del trabajo técnico en la empresa, se encarga de verificar la calidad del cacao producido en comunidades como Timbre, de donde sale la mayor cantidad del producto.

Explica que entre las proyecciones de la empresa está lograr la exportación de los productos derivados del cacao, más aun tras el acuerdo con la Unión Europea.

Desde Esmeraldas dos asociaciones exportan cacao a Suiza, pero Santillán señala que se puede lograr más espacios en Europa.

Por eso la empresa se preocupa del cuidado del ambiente, a través de una finca modelo, en donde se siembra cacao orgánico.

La idea, también, es mostrar a los productores sobre la agricultura sin químicos.