El empresario Chris Gardner comenta que la película, basada en su biografía, ‘En busca de la felicidad’, solo cuenta un año de su vida. Foto: Facebook Cámara de Comercio de Quito

El empresario Chris Gardner comenta que la película, basada en su biografía, ‘En busca de la felicidad’, solo cuenta un año de su vida. Foto: Facebook Cámara de Comercio de Quito

‘El éxito de un negocio no solo implica dinero, sino pasión’

23 de abril de 2018 06:43

Chris Gardner es un empresario que vivió en las calles de San Francisco. Brinda consejos para quienes se mueven en la industria. 

En su trayectoria como conferencista, usualmente, suele referirse a la pasión que se debe tener en la vida para hacer las cosas y, sobre todo, para que algo resulte como, por ejemplo, un negocio. En Ecuador, sin embargo, la mayoría de los emprendimientos surgen por necesidad. ¿Qué pasa en esos casos?

Entiendo que eso es todo un reto. No es solo que quiero emprender, sino que debo pagar la renta, las cuentas. Es cuando uno dice “tengo qué hacer algo ahora”. En ese proceso, una de las cosas que debe hacerse es tomar la decisión: lo que quiera que se vaya a hacer, se tiene que hacer bien.

¿Qué problemas ha visto usted en los emprendedores?

La gente joven con la que hablo quiere hacer todo rápido a causa de la globalización y la tecnología y así no son las cosas. Deben saber, además, que las personas con las que uno está compitiendo no están solo en el barrio, sino en el planeta. Por necesidades económicas uno puede querer todo ahora, pero hay que hacer las cosas bien, lo mejor que se pueda. Tal vez uno no esté enamorado de lo que hace, pero es en lo que se está trabajando ahora.

¿En qué frase resumiría estos argumentos?

A veces hay que hacer lo que se tiene que hacer, antes de hacer lo que se quiere hacer. No hay nada equivocado con eso.

¿Qué pasa cuando una persona, como un emprendedor, pierde la pasión o, al menos, el interés por hacer lo que, actualmente, está haciendo?

Tiene que salir del negocio.

¿Por qué?

Por que hay que sentirlo. No puede ser solo el interés de ganar dinero para el negocio, hay que sentirse bien. Hay que levantarse y decir ¡Sí, vamos ahí!

Y si se acaba la pasión, pero tengo personas a las que doy trabajo ¿Cómo les ayudo si mi alternativa es cerrar la compañía y hacer otra cosa?

La respuesta es vender la empresa a los trabajadores. O vender la firma a alguien que tenga la pasión. La vida es demasiado corta, hay que hacer lo que se ama.

En el libro “En busca de la felicidad”, que de hecho es una biografía suya, usted cuenta sobre algunos giros que tuvo en su vida. Lo que me llamó la atención es que cuando usted era muy joven quería vincularse a la medicina, pero terminó en el sector financiero.¿Cómo logra un emprendedor, que tiene un interés pero por cuestiones de la vida debe hacer otra cosa, cambiar su chip mental?

Para eso las personas tienen habilidades, talento y experticia. Todo eso es transferible. Se las puede poner en práctica en cualquier área que exista en la vida.

¿Qué aprendió usted durante los giros de su vida?

Lo que aprendí durante los años que estuve vinculado a investigaciones médicas me lo llevé a Wall Street. Me refiero con eso a estudios, análisis, procesos, etc. Cuando llegué a Wall Street estaba listo, porque tenía todo eso.

¿Cómo favorece al desarrollo de un emprendedor la compra y venta continua de las compañías? Hablo de esto porque en su historia, precisamente, usted aplicó esta metodología financiera.

Todo lo que aprendes te lo llevas contigo. Eso es más valioso que el dinero. Es importante crear siempre oportunidades nuevas. Cuando uno tiene éxito sabe que puede seguir creciendo más.

¿Cuáles son las claves para el éxito y la felicidad?

Creo que la felicidad es el éxito. Todos tenemos que ganar dinero, pero eso no te hace feliz. Para mi la felicidad es la salud, el hecho de haber criado a dos hijos que se volvieron buenos jóvenes, que hago un trabajo que refleja mis valores y que tengo dos personas especiales: mi nieta y mi ahijada.

¿Cree que si alguien se salta un proceso doloroso que hay que vivir es posible que la vida lo lleve de nuevo a un punto similar para vivir ese dolor? ¿Hay algún propósito?

Sí. Todo se trata de pasos y pasos que no son posible saltarse. En los Estados Unidos la gente joven quiere todo para ahora, para hoy. Tienen en su mente algo y quieren que las cosas sucedan rápido. Hay que hacerles entender que en la vida las cosas no ocurren de esa manera. La gente joven debe pensar que si uno tiene destrezas es necesario que invertir en eso para salir adelante en cada paso que se presenta.