Donald Trump anunció en época de campaña su oposición a los acuerdos de libre comercio y la aplicación de mayores aranceles a los productos importados, con el fin de generar más fuentes de empleo en Estados Unidos.

De concretarse esta política proteccionista, cualquier intento para lograr un acuerdo comercial entre Ecuador y Estados Unidos, como el que ya tienen Colombia o Perú, sería infructuoso para el próximo Presidente ecuatoriano.

Estados Unidos sigue siendo el principal socio comercial del país. Las exportaciones nacionales al mercado estadounidense representaron el año pasado el 40% del total.

Pero las restricciones que anunció Trump serían a productos que compiten con bienes fabricados en EE.UU. En la campaña, Trump se refirió, por ejemplo, a los autos ensamblados en México, que han afectado la producción y el empleo en ciudades como Detroit.

Los productos ecuatorianos que se venden en Estados Unidos no tienen ese problema, ya que el país exporta básicamente petróleo, flores, banano, cacao, camarón, etc. Sin embargo, el efecto sería indirecto, pues una restricción a las importaciones en EE.UU. tendría un impacto global, ya que se trata de la mayor economía del mundo. Lo anterior afectaría a la Unión Europea o China, que son grandes jugadores en el mercado estadounidense. Y si cae el comercio, la economía en esos países también. Se perderían empleos y bajaría la demanda de productos que Ecuador coloca en esos mercados.

La cotización del dólar, el precio del petróleo y las tasas de interés en EE.UU. también pueden entrar en un período de volatilidad por la incertidumbre en EE.UU.

Por ahora, la cotización del crudo se mantiene estable, aunque ha caído en las últimas semanas. Habrá que esperar las decisiones de la Reserva Federal sobre un aumento de las tasas de interés a finales de año, lo cual haría más costosa una emisión de deuda ecuatoriana, señala Ramiro Crespo, presidente de Analytica Investments S.A.

Ayer, el dólar perdió valor, frente al yen, pero se apreció frente al euro. Una devaluación generaría una mayor competitividad de las exportaciones ecuatorianas.