Los productos naturales de la firma Jalea Real se distribuyen en más de 2 000 centros naturistas del país. Su promotor, Mario Escobar, consolidó la marca con una estrategia de mercado. Foto: Juan Carlos Pérez / LÍDERES

Los productos naturales de la firma Jalea Real se distribuyen en más de 2 000 centros naturistas del país. Su promotor, Mario Escobar, consolidó la marca con una estrategia de mercado. Foto: Juan Carlos Pérez / LÍDERES

3 000 productos llenan el stock de su centro naturista

8 de February de 2015 12:45

Estrategia. Jalea Real es un emprendimiento que comercializa productos naturales. Su centro de operaciones está en Santo Domingo y de allí se distribuyen hacia todo el país.

Cuando el negocio funcionaba en un local de 4x4 m2 y con dos vitrinas, un crédito de USD 75 000 tocó la puerta del entonces centro naturista Jalea Real.

Corría el año 2007 y Mario Escobar “no podía creer” que la banca le abría la puerta para despegar con su emprendimiento familiar, que durante 18 años subsistió en dos locales arrendados.

Aceptó el préstamo con cierto nerviosismo, porque consideró que ‘sería imposible’ pagar ese monto, pues las ganancias apenas le alcanzaban para sostenerse.

Pero se arriesgó y adquirió un terreno de 287 m2 en la calle Cocaniguas y Río Pilatón, en el centro de la ciudad de Santo Domingo, donde en la actualidad funciona la matriz del negocio.

En un principio, construyó una infraestructura de un piso; se dotó de modernos estantes y adquirió más insumos naturales. Esto tomó forma con el crédito que el banco le aprobó en sus inicios.

Con los años, levantó una moderna edificación de cuatro pisos y abrió cuatro puntos de venta en la provincia, en donde comercializa más de 3 000 productos naturales con registro sanitario.

También logró contactos nacionales con 2 000 centros naturistas del país y centenares de personas que comercializan sus artículos. Este crecimiento se refleja en su facturación que en el mes es de USD 20 000.

Jalea Real desde el 2008 se convirtió en compañía limitada. Para su propietario, Mario Escobar, este es un sueño realizado que se debe a su padre, Adolfo Escobar, quien siempre deseó que su negocio “se roce” con las grandes cadenas de comercios del país. Hace 30 años, Adolfo empezó a construir su sueño al instalar el primer centro naturista de Santo Domingo, en las calles Guayaquil y Manta. Incursionó en esta línea por una experiencia propia con estos medicamentos.

Él padecía de cirrosis y su confianza hacia estos remedios curó su dolencia. Entonces, dice, quiso que otras personas encontraran una alternativa a sus problemas invirtiendo poco y apostándole a lo natural. Con sus cuatro hijos administró el negocio y a todos les inculcó que “con constancia, perseverancia y responsabilidad se llega al camino del éxito”.

Mario Escobar comprendió el mensaje de su padre y cuando él se retiró de la actividad, porque ya no tenía energías para seguir, puso a caminar a la empresa con nuevas ideas y una mejor imagen.

En aquella época invirtió unos 200 000 sucres en mercadería. En los dos primeros locales que rentó, Escobar y su esposa atendían casi las 24 horas del día. No había vacaciones, viajaban casi a diario para comprar los productos a laboratorios en Guayaquil.

Pero la contraparte vino con la respuesta masiva de la clientela que luego selló una fidelidad inseparable. Eso se consiguió gracias a las redes de distribución que se tendieron en el país y en la provincia. La estrategia: entrega de créditos accesibles a los pequeños comercios y tiendas. En Pichincha funcionó a la perfección y hoy son más de 500 centros naturistas que trabajan bajo esa modalidad.

Jalea Real se especializa en la distribución de vitaminas, minerales, medicina fitofarmacéutica, cosméticos naturales, alimentos y productos nutricionales. Los proveen los laboratorios certificados.

Uno de esos es el laboratorio Fitoterapia de Quito. Su gerente, Alfonso Delgado, refiere que Jalea Real es uno de los más grandes captadores de sus productos.

Hace 20 años tuvieron el primer contacto y desde entonces no se desvinculan. Los productos de Jalea Real, que están basados en la medicina preventiva, van desde los 2 centavos hasta los USD 30.

Boris Alexander los comercializa desde hace ocho años en Esmeraldas. Señala que en su centro naturista “las personas compran los artículos por su eficacia”.