La empresa Agroeden, ubicada en Santo Domingo de los Tsáchilas, maneja 1 300 hectáreas, aunque no todas están sembradas; exporta a Sudamérica, EE.UU., Francia y Alemania. Foto: Cortesía: Agroeden

La empresa Agroeden, ubicada en Santo Domingo de los Tsáchilas, maneja 1 300 hectáreas, aunque no todas están sembradas; exporta a Sudamérica, EE.UU., Francia y Alemania. Foto: Cortesía: Agroeden

Ecuador produce piña de calidad con tecnología y certificaciones

10 de febrero de 2022 19:03

Ese sabor dulce y aroma penetrante de la piña se consigue con un buen sol, humedad y una temperatura que no baje de los 21 grados ni exceda más de los 32.

Esas condiciones climáticas están en el subtrópico húmedo, específicamente en la provincia de Santo Domingo de los Tsáchilas, que incluye a La Concordia.

En ese territorio se encuentra la mayor producción de esta fruta y desde ahí se exporta. Una pequeña parte sale de Los Ríos y Guayas.

A lo largo de los cuatro carriles de la vía estatal Santo Domingo- La Concordia van apareciendo en ambos lados extensas plantaciones de esta fruta, cuyas exportaciones se recuperaron en 2021.

Gilbert Torres, uno de los productores del país, mantiene 450 hectáreas en esa zona, a la que considera ideal por su clima, para producir piña de calidad.

Pablo Ribadeneira, otro productor de esa área, remarca por qué la piña ecuatoriana es muy apetecida, sobre todo de Estados Unidos y Europa. Él es dueño de 1 300 hectáreas, con su empresa Agroeden.

En términos técnicos, para conseguir esa dulzura se requiere que tenga un brix mínimo de 13 grados (el brix es un parámetro que mide la concentración de sacarosa en las frutas); que no tenga defectos y esté sana (sin hongos).

Germán Loachamín, gerente general de Agroeden, da otros elementos: ese dulzor se equilibra con un buen tiempo de vida en percha y acidez. Esa es la piña de calidad que esta firma produce y exporta a Chile, EE.UU. y Europa.

Ribadeneira, también vicepresidente de la Asociación de Productores de Piña del Ecuador (Asopiña), detalla que la variedad que se siembra es la Golden Sweet (MD2), la misma que tiene Costa Rica, el primer productor mundial de esta fruta; los ecuatorianos importan las semillas de ahí. Solo por mencionar, ese país tiene algo más de 40 000 hectáreas. Ecuador posee apenas 3 300.

Agroeden, la segunda productora más grande del país después de Terrasol, -según Ribadeneira- se tecnifica y tiene cinco certificaciones que la hacen competitiva.

Loachamín explica que se ha mecanizado el manejo de la fruta. Por ejemplo, se han reducido los golpes en la poscosecha, porque tienen equipos semiautomatizados de cosechadoras, un sistema de descarga y un empaque controlado de temperatura: mientras más rápido se acople la piña a los siete grados tendrá más duración.

El técnico Gustavo Triviño
agrega que la preparación del suelo y la siembra están mecanizadas. Y poseen una estación meteorológica para tener información climática durante el año con el fin de prevenir problemas y así lograr producir una fruta de calidad.

Todo esto se complementa con las cinco certificaciones de buenas prácticas agrícolas, cuidado del medio ambiente y el respeto a los derechos laborales. Estas son GlobalGap, Rainforest, BASC, Smeta, BSCi y Carbono Neutro.

En la empresa Agrotorca, cuyo gerente es Gilbert Torres, igualmente se cuida el proceso de siembra y su manejo nutricional, para obtener una fruta de calidad.

Por esa razón, contrató hace dos años a un técnico costarricense para que se encargue de la plantación, debido a sus conocimientos al provenir de ese país.

Este productor también cuenta con la certificación GlobalGap. Eso ha incidido en unas mejores prácticas agrícolas y en el cuidado y trato de las personas que trabajan en Agrotorca, asegura Torres. Les hacen dos auditorías anuales.

Cada semana produce ocho contenedores para enviar hacia Chile, EE.UU. y Europa, y el mercado nacional. Su proyección para este año es aumentar la siembra, para duplicar esa cifra: de 15 a 16 contenedores. Para ello, realiza un crédito con la banca privada.

Cerca de esas dos plantaciones está San Francisco SA. La gerente Ana María Hidalgo cree que su piña, que cosecha en sus 210 hectáreas, llega a tener ese brix de 13 grados, porque al comerla se siente ese rico sabor dulzón.

Contar con las certificaciones GlobalGap, desde hace 15 años; y la Rainforest, desde hace cuatro años, ha influido en la cosecha de una fruta, que se nutre de insumos permitidos por Europa, en la protección de las fuentes de agua y en el cumplimiento en el pago y compensaciones a los empleados, manifiesta esta productora.

Ella -dice- pone énfasis en la preparación del suelo para nutrirlo bien, con microorganismos y bacterias benéficas, para proteger a la piña de los patógenos. Ese proceso se acompaña del control fitosanitario aéreo. Los seis u ocho contenedores de fruta van a Chile, Argentina, Uruguay y Francia.