Susana Malcorra, actual decana del IE School of Global and Public Affairs y exministra de RR.EE. de Argentina. Foto: cortesía

Susana Malcorra, actual decana del IE School of Global and Public Affairs y exministra de RR.EE. de Argentina. Foto: cortesía

Susana Malcorra: ‘La elección del nuevo presidente del BID despierta mucho interés y debiera postergarse’

3 de septiembre de 2020 14:29

El próximo 12 de septiembre se tiene previsto elegir al nuevo presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). El funcionario que sea electo reemplazará al colombiano Luis Alberto Moreno.

La decision de EE.UU. de mocionar un candidato para ocupar ese cargo (Mauricio Claver-Carone), despierta críticas porque tradicionalmente esa designación ha recaído en un latinoamericano.

Susana Malcorra, actual decana del IE School of Global and Public Affairs y exministra de RR.EE. de Argentina, reflexiona sobre la elección de uno de los cargos más importantes en el ámbito financiero regional.

¿Por qué la elección del nuevo presidente del BID se ha convertido en un tema de interés no solo para la región sino para el mundo?

En primer lugar, todas las instituciones multilaterales ya sean regionales o globales están teniendo una atención especial por las complejas dinámicas que hay en el mundo respecto a la visión de la integración y del orden existente; es así, en términos generales. El hecho de que haya habido una propuesta por parte de Estados Unidos, un candidato para estas elecciones (Mauricio Claver-Carone), obviamente potencia la atención porque el acuerdo existente dentro del BID es un acuerdo para el cual Latinoamérica tendría candidaturas para la presidencia, mientras que Estados Unidos se reservaba la vicepresidencia ejecutiva. Entonces, el hecho que haya una alteración del orden existente genera un enorme interés, una enorme tensión y una reconfirmación que las instituciones están siendo afectadas por acción u omisión, y están siendo debilitadas de alguna manera.

¿Por qué cree que EE.UU. tiene interés en impulsar un candidato?

Eso es difícil de entender porque claramente toda la arquitectura del BID está armada para asegurar a EE.UU. que, por supuesto tiene el 30% del capital de la institución, tenga vía segura de su manejo. No solo tiene el manejo de la vicepresidencia ejecutiva, sino que tiene una serie de puntos de control, puntos de veto que aseguran que la institución se maneje en concordancia o con un entendimiento con los lineamientos de EE.UU. Y esto ha funcionado así desde que la institución se creó. Entonces, ¿por qué ahora ocurre esto? Porque entra en la dinámica de lo que dije al principio de todo lo que representa en este momento el multilateralismo y el manejo institucional del multilateralismo, así como también se puede enmarcar en la confrontación entre EE.UU. y China, y la realidad de EE.UU. viendo una influencia creciente de China en la región y entendiendo al BID como un instrumento para contrarrestar o compensar esta influencia.

¿Las próximas elecciones en EE.UU. también pueden tener una conexión con el objetivo de llegar a la Presidencia del BID, con la candidatura de Donald Trump?

Hay quienes sostienen que puede haber una unión entre el tema de esta candidatura y la necesidad de mantener una fuerte presencia y señal sobre la comunidad de hispanoparlantes, sobre todo de la comunidad cubana de Florida. Yo soy de las que cree que esos votantes no se ven muy asociados con la realidad de lo que pasa con el BID, pero hay quienes sostienen dentro de los EE.UU. que esto no es así y que sobre todo el senador Marco Rubio, que es el fuerte representante de esta comunidad y que también apoya a la candidatura del candidato propuesto y realmente se ve esto como una oportunidad.

¿Cómo evalúa la reacción de los países latinoamericanos a este interés de EE.UU.?


Yo entiendo que una vez más se ha mostrado que la región está muy partida, muy dividida. Ha habido reacciones muy rápidas de muchos países que a mí me han sorprendido porque han reaccionado al apoyo de una candidatura. Se debe tener una lectura más institucional, más del impacto que esto tiene en la institución y el impacto que tiene en el mediano y largo plazo. Me parece que esto ha empezado a cambiar, me parece que hay una corriente de gente que entiende que esto va más allá de la elección y las candidaturas. Para esto quiero ser muy clara, mi posición no está vinculada a ninguna candidatura en particular. Yo tengo una enorme preocupación por el debilitamiento del BID por el hecho de que el BID se transforme en un campo de batalla y que el BID tenga eventualmente alguien a la cabeza que no ha surgido de un esquema de aguas tranquillas, aún cuando haya más allá de un candidato, un posicionamiento, un diálogo y un entendimiento. Entonces, me parece que es importante que las nuevas voces que se empiezan a escuchar generen por lo menos la oportunidad de repasar y repensar que es lo que está pasando.

¿Puede haber algún tipo de riesgo con un cambio de timón en el manejo del BID?

En cuanto al riesgo que haya un americano y yo no particularizo a nadie en particular que haya un americano. Yo creo que como dije antes, la arquitectura del BID está armada en este entendimiento de Latinoamericano o Latinoamericana de presidente y un americano o americana de segundo. Esto es ha sido en la práctica y en la forma en casi todas estas instituciones. Yo les quiero recordar que el FMI esta entendido que es encabezado por un europeo o europea mientras que el BM es encabezado o encabezada por un americano o americana. Es decir, que no es una cosa única de nuestra región, es así, y cuando se arman estas estructuras, se arman con una serie de reservas cruzadas para asegurar que los controles estén en línea con los aportes de capital. Que estén en línea con el entendimiento y la estrategia de la institución. Por eso yo creo tan fuertemente que es importante postergar la elección porque me parece que la elección tiene que venir a consecuencia de una revisión a fondo del posicionamiento del BID. Sobre todo una revisión a fondo a la luz de lo que está pasando con el Covid y el hecho que no haya habido la asamblea de gobernadores este año, que se haya postergado primero a mitad de año y finalmente hasta el año que viene, es una prueba de que no ha habido una actualización de diálogo. Y no ha habido una actualización de visión estratégica a la luz de una emergencia como la que está pasando el mundo y la region. Y a la luz que el impacto que esta emergencia sanitaria trae a la región en lo económico y social.

¿Se deben revisar las prioridades del BID?

Hay que revisar las prioridades del BID, hay que ubicarlas en la consecuencia de esta realidad y que esta es un pre-requisito para elegir a la persona que se elija, más allá de lo que yo creo que sea el perfil de la persona, tiene que ser de la region, hay otro requisito de perfil y eso me parece que solo se resuelve con una postergación. Me parece que esta es la única manera de generar genuinas oportunidades y creo que un apresuramiento que fracture y que muestre una región fracturada y aparte muestre una toma de espacios por parte de EE.UU. que exceden el entendimiento fundacional de la institución, va en contra del fortalecimiento del BID que es más necesario que nunca. Creo que esta es la única salida posible. Se necesita un BID sólido, con elementos concretos de la visión estratégica y del plan de un mediano y corto plazo; y un candidato o candidata que se transforme en presidente o presidenta, que efectivamente cuente con una mayoría de adhesión profunda. No solamente que sean los porcentajes que permiten lograr acceder a la silla de la presidencia. Eso solo se puede lograr con un proceso un poco más amplio, un poco más conversado, un poco más pausado. Hay momentos en los cuales hay que detenerse un poco para después poder ganar en la compresión del mediano y largo plazo.