Cargamentos de atún llegan a diario al puerto marítimo de Manta, en Manabí. El túnido es uno de los principales productos de pesca que exporta Ecuador a diferentes mercados. Foto: Archivo / LIDERES

Cargamentos de atún llegan a diario al puerto marítimo de Manta, en Manabí. El túnido es uno de los principales productos de pesca que exporta Ecuador a diferentes mercados. Foto: Archivo / LIDERES

Los envíos de atún dejan menos divisas

19 de enero de 2017 11:22

Las capturas de atún siguen apuntalando las exportaciones ecuatorianas de pesca blanca, aunque estas, en total, se redujeron levemente en el 2016.

Los envíos de pesca blanca alcanzaron las 227 000 toneladas entre enero y noviembre del año pasado. Estas dejaron divisas por USD 3 592 millones, según datos del Banco Central. Los datos reflejan una contracción del 4,6% y 5,2% en su orden, con relación al mismo período del 2015.

Ecuador no solo procesa y exporta el túnido que captura su flota pesquera en aguas nacionales y del Pacífico oriental; además procesa el producto capturado por embarcaciones de otros países. Mónica Maldonado, directora de la Cámara Ecuatoriana de Industriales Procesadores de Atún (Ceipa), considera que la alta capacidad de procesamiento y la tecnología de las plantas atuneras del país las hacen atractivas para el procesamiento de las capturas de otros países.

La pesca industrial ecuatoriana se concentra en las embarcaciones atuneras y sardineras, cuyas capturas se destinan a los mercados de la Unión Europea (UE) y Estados Unidos, principalmente. Otra parte de la producción pesquera sirve para satisfacer la demanda local, como producto enlatado u otras presentaciones.

Un estudio sectorial elaborado por la Espae Graduate School of Management, la escuela de negocios de la Escuela Politécnica del Litoral y presentado en el 2015, destaca que aunque la mayoría de la producción pesquera se orienta al consumo humano directo, una parte, desperdicios de la pesca y algunas especies de menor tamaño y valor comercial, se destina a la elaboración de derivados, como harina y aceite de pescado.

“A su vez, la orientación hacia el mercado exportador hace que la industria deba satisfacer requerimientos de calidad y seguridad de la producción, estándares técnicos, etiquetado y certificaciones sobre sostenibilidad biológica”, detalla el documento.

Los exportadores de pesca blanca, en general, y los atuneros, en particular, esperan que el acuerdo con la UE, que entró en vigencia el pasado 1 de enero, sea un empuje para incrementar sus ventas al bloque de 28 países.

Para Bruno Leone, presidente de la Cámara Nacional de Pesquería, el acuerdo comercial resulta clave porque los atuneros ecuatorianos esperan recuperar el espacio que perdieron en los últimos años debido al ingreso de otros proveedores que no estaban pagando aranceles.
Europa sigue siendo el destino de alrededor del 60% del atún que el país exporta. Según Leone, las exportaciones al bloque europeo superaron los USD 506 millones entre el 2015 y el 2016.

Franklin Ormaza, investigador de la Espol y colaborador del estudio presentado por la Espae sobre la industria pesquera, menciona que las especies más capturadas en aguas ecuatorianas son: atún, con un promedio anual de 180 000 toneladas métricas; pez dorado, entre 1 200 y 5 000 toneladas; y pez espada, entre 4 000 y 7 000 toneladas métricas. La flota pesquera también captura peces pelágicos, que viven cerca de la superficie; estos suman 400 000 toneladas.

Según Ormaza, Ecuador mantiene el puesto 25 entre los mayores países pesqueros del mundo, el décimo como productor de harina de pescado y domina en capturas de atún del Pacífico este u oriental. “También procesa casi el 10% de toda la producción de atún, que es de 5 millones de toneladas al año”, indica el investigador de la Espol.

En agosto pasado, en la antesala de la firma de acuerdo comercial con la UE, el bloque ya exoneró del arancel del 24% con el que se gravaba al atún procesado y exportado desde Ecuador, pero capturado por flotas de otros ocho países, incluidos Colombia, Perú y Panamá.
La imposición del arancel al túnido de terceros países era considerado por los industriales atuneros del país como un obstáculo comercial. Según el sector, el atún procedente de las capturas de otros países, pero procesado en las plantas del país, representa alrededor del 30% de las exportaciones totales de Ecuador.

La flota atunera ecuatoriana captura el 48% de toda la pesca en la zona del Pacífico oriental, según reportes de la Comisión Interamericana del Atún Tropical (Ciat). En esta región del Pacífico se capturan al año entre 350 000 y 400 0000 toneladas.

Según datos del Banco Central, las exportaciones de pesca y atún se han reducido en cuanto a volumen, en alrededor de 25 000 toneladas desde el 2013.