Parte del equipo de trabajadores que conforman  la Asociación de Servicios de Limpieza, que opera en distintos barrios de Esmeraldas. Foto: Marcel Bonilla / LÍDERES

Parte del equipo de trabajadores que conforman la Asociación de Servicios de Limpieza, que opera en distintos barrios de Esmeraldas. Foto: Marcel Bonilla / LÍDERES

18 barrios se unen por la limpieza

5 de enero de 2017 11:49

Cincuenta mujeres de los barrios del sur de Esmeraldas realizan la limpieza hospitalaria en la Unidad de Salud tipo C, de Las Palmas. Este espacio de trabajo les permite a cada una de las mujeres un ingreso mensual de USD 366 (375 desde este año), más horas extras mediante una tarea que implica mantener desinfectadas todas las aéreas de esta casa de Salud, que atiende un promedio de 400 personas diarias.

Desde hace ocho meses cuando se conformó la Asociación de Servicios de Limpieza (Asoserliser), por medio de la Superintendencia de Economía Popular y Solidaria, se dio oportunidad para emplear a 100 personas de 18 barrios.

La organización nació para defender los espacios de trabajo de los habitantes del Valle de San Rafael, donde habitan unas 50 000 personas. Luego 18 de 60 dirigentes barriales decidieron legalizar una asociación para buscar oportunidades ofreciendo estos servicios de limpieza.
Una vez conformados legalmente, el talento humano empezó un proceso de integración para que se cataloguen en el portal de contratación pública, explica Damián Vera, representante legal de la Asoserliser.

Como asociación de limpieza están catalogados en tipos de limpieza: limpieza tipo 2, que es la que se realiza en oficinas. La tipo 3, que es una limpieza más completa y que se lleva acabo en las entidades públicas.

En ocho meses de trabajo la Asociación ha logrado tres contratos de USD 24 000, 40 000 y
60 000; además oferta sus servicios a otras entidades.

Entre las instituciones que les han abierto las puertas están el Distrito de Salud de Esmeraldas, Termoesmeraldas y Cenel-Esmeraldas, con contratos para limpieza de oficinas y ambiental.

“Esta es una buena experiencia porque se ha empezado a confiar en la iniciativa esmeraldeña, que puede hacer un buen trabajo”, señala Carme Joutieaux, presidenta de la organización.
Para Lorena Ontaneda, usuaria de la unidad de Salud, el trabajo de limpieza se nota, porque en la sala de urgencias en donde ha estado por su embarazo, siempre las encargadas de la limpieza están pendientes de que todo esté higiénico.

Quienes realizan la limpieza son mujeres de barrios como Propicia 1 y 2, El Quilombo, Valle Hermoso, Voluntad de Dios, Los Samanes Alto, Lucha de los Pobres, Cóndor Mirador, Gatazo, entre otros.

Daira Valencia es una de las mujeres que trabaja para esta organización popular. Ella se ha preparado en temas como desinfección hospitalaria; está a cargo de un grupo de mujeres que realiza el trabajo.

La proyección de esta Asociación de limpieza es constituirse en una gran organización que puede competir en el resto del país. Por eso Gaby Campos, integrante de la Asociación, se encarga de retroalimentar a sus compañeras con la capacitación que recibe periódicamente del Servicio de Contratación Pública y la Superintendencia de Economía Popular y Solidaria, en temas de manejo de desechos hospitalarios.

Cristian Coral, funcionario de los Servicios de Salud, asegura que el trabajo de la organización es importante porque ha logrado ajustarse a los parámetros de calidad, exigidos durante los cinco meses que llevan trabajando.

Esta es una de las organizaciones populares de limpieza que con una visión de empresa ha logrado ganar espacio en poco tiempo entre las entidades del sector público.

Huberto Quimí, coordinador de la Asoserliser, explica que la organización está en la capacidad de competir con otras empresas que ofrecen este servicio en el país, por la experiencia lograda con su equipo de 100 personas.

La organización también aprovecha los fines de semana para hacer trabajo social con los habitantes de los barrios del sur, a los que se les enseña métodos de emprendimientos para mejorar la economía familiar.

Roxana Benítez, de la unidad de emprendimiento de la Universidad Católica de Esmeraldas, señala que como universidad están dispuestos a fortalecer estas iniciativas, que redunden en beneficios de las familias del sur de la ciudad de Esmeraldas