Vertmonde se dedica a la gestión de desechos electrónicos. A corto plazo busca involucrarse más con la comunidad y abrir otra planta.

Vertmonde se dedica a la gestión de desechos electrónicos. A corto plazo busca involucrarse más con la comunidad y abrir otra planta. Foto: Cortesía Vertmonde

El objetivo es elevar el impacto social

16 de marzo de 2020 09:21

En los próximos cinco años se espera que las empresas sostenibles se destaquen 11% más en el mercado bursátil frente a sus competidores. Así lo explica Camila Hernández, experta en Sostenibilidad de Deloitte.

Este tipo de organizaciones tiene una cuenta de triple resultado, es decir son aquellas cuyo eje se centra en lo económico, social y ambiental. Estas tienen un notable compromiso dentro de la alta dirección y en sus decisiones buscan generar impactos positivos en las tres áreas, por lo que es un buen negocio para todos.

Cada vez es más relevante la sostenibilidad, sea en las empresas que nacieron bajo esta lógica, como en aquellas que están adoptando estrategias en este sentido. El estudio Tendencias de Sostenibilidad, elaborado por Deloitte en Ecuador en el 2019, muestra que el 74% de 105 empresas consultadas ha hechos explícito su compro­miso por lo sostenible en su misión, visión, etc.

Hernández explica que como parte de una política de transformación o profundización de la estrategia de sostenibilidad, a futuro las empresas deben preguntarse ¿en dónde está la atención del de­sempeño financiero?, ¿dicha atención genera impactos positivos o negativos a actores del cadena de valor?, ¿cuáles son los riesgos y oportunidades de no atender dichos impactos?, ¿cuáles son las tendencias del mercado a futuro?

Compañías con origen sostenible como Vertmonde, que se dedica a la gestión de desechos electrónicos, ya lo ha hecho.

El año pasado inició un proceso de certificación como empresa de sistema B, es decir de alto impacto social y ambiental definido. La firma busca enfocarse más en sus trabajadores y aumentar el contacto con la comunidad. Asimismo, este año abrirá una segunda planta de tratamiento de residuos para atender a más sectores.

Vertmonde conformará una corporación en la que participarán fabricantes de equipos electrónicos, academia, importadores, la misma compañía, entre otros actores para desarrollar una campaña permanente de reciclaje de residuos electrónicos.

Las empresas de menor tamaño, con origen sostenible, no se quedan fuera de estas transformaciones. Twins Grill es un restaurante de carnes que tiene políticas de no desperdicio de alimentos: los cortes son los apropiados para los comensales, los vegetales que un cliente deja se recogen y sirven para la preparación de compost, para la siembra por parte de terceros, el aceite se recicla y se entrega a gestores, etc.

“El futuro es crecer en número de ventas pero aplicar las mismas metodologías en mayor grado, con la idea de cubrir varias áreas de la ciudad”, indica la pyme.

Mientras que Alku, que fabrica juguetes de mascotas con plástico y otros artículos reciclados, tiene como proyección impulsar más su producción. Por cada juguete que elabora recicla una botella plástica. Las etiquetas son de caña reciclada, lo que permite que los gestores las reutilicen.

La mayoría de empresas que se han enfocado seriamente en estrategias de este tipo buscan cumplir los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) 2030. José Miguel Yturralde, director de la consultora de Ypsilom, explica que esto se reforzará durante la década. “Hay firmas que, incluso, están apadrinando un objetivo. Las Naciones Unidas tienen una metodología que se llama Brújula de los ODS, con cinco pasos, que indican, que las empresas deben enfocarse en uno de ellos, establecer metas e indicadores de cumplimiento, comunicar, etc”.