Las trabajadoras de la finca organizan los bouquets en la zona de poscosecha. Cada uno de los arreglos florales contiene flores que destacan, así como follaje. Foto: Vicente Costales / LÍDERES

Las trabajadoras de la finca organizan los bouquets en la zona de poscosecha. Cada uno de los arreglos florales contiene flores que destacan, así como follaje. Foto: Vicente Costales / LÍDERES

La flor ecuatoriana viaja en bouquet

5 de septiembre de 2016 09:48

“No cierre la finca. Trabajaremos, incluso, sin sueldo, pero hay que seguir adelante”. Así fue como los trabajadores de Pacific Bouquet lograron que la exportadora se mantenga firme en el mercado luego de una granizada que destrozó casi todos los cultivos hace unos dos años.

Casi con lágrimas en los ojos recuerda esta anécdota Pablo Viteri, dueño de esta compañía, ubicada en Oyambarillo (al este de Quito) que se especializa en la comercialización de bouquet a diferentes destinos en el exterior.

La empresa tiene ya diez años. Sin embargo, su historia comenzó hace 20. “Junto a mi esposa nos asentamos en el lugar y nos dedicamos al negocio de producción de leche. Luego de un tiempo vendimos las vacas y nos dedicamos de lleno a las flores y la exportación de bouquets”, dice Viteri.

El empresario tenía experiencia en el tema, pues fue apoderado de la exportadora ecuatoriana Hilsea, una de las floricultoras más grandes del mundo, desde 1987.

Pacific Bouquet arrancó la producción con una hectárea y ahora cuenta con 5,7 hectáreas. La cantidad se ha mantenido pues la finca no tiene más espacio cultivable y el propietario ha decidido no expandir más el tamaño del sitio.

En la finca se cultivan rosas spray, áster, craspedias, girasoles, gérberas, hypericum, etc. También, follaje como eucaliptos grises y verdes, ruscus, ciprés, entre otras plantas.

La producción semanal promedio inicial fue de 30 000 tallos; hoy en día la cifra llega hasta 80 000 tallos (según de la temporada). Y el 80% se destina a la exportación a mercados como Canadá, Estados Unidos y la Unión Europea (UE). Sin embargo, también han tenido pedidos ocasionales para destinos como Dubai, en los Emirato sÁrabes Unidos, y Rusia.

El valor agregado de esta empresa está en el producto que exporta: el 60% de las exportaciones corresponde a bouquets y el resto a sólidos (bonches de diferentes flores, principalmente spray e hipericum).

Alejandro Martínez, presidente de Expoflores, indica que la tendencia de consumo en destinos de América del Norte y la UE está creciendo para los arreglos, principalmente de venta en supermercados como comercio en línea. “No les interesa llegar a casa y armar un arreglo, sino tenerlo hecho (...) En Ecuador hay pocas empresas que se dedican a esta actividad”, asegura el directivo.

Las compañías que se dedican a esto, explica Martínez, tienen que concentrarse en la parte de valor agregado que incluye conocer colores de moda, tendencia, tipos de arreglos, papel para colocar,. etc.

Esto lo conoce bien Viteri. El cuenta que un bouquet tiene al menos 10 tallos, incluyendo flores y follaje. “Este es un mercado en el que prima la moda. Si uno no está con las tendencia no avanza”.

Otro aspecto en este mercado es el fuerte control de calidad. El empresario explica que entre el 5% y el 8% del producto que se cosecha es descartable, lo que implica un porcentaje mayor que en la exportación de otros productos.

De este y demás procesos se encargan 45 personas en Pacific Bouquet. Al inicio solo tenía 25.

En esta empresa no existe rotación de personal. La mayoría de las personas, que son de poblados en los alrededores de la finca, trabaja desde que inició.

Los trabajadores reconocen que se trata de una línea especializada. El 20% que no se exporta directamente, se vende a otros exportadores o se destina al mercado local. En el primer caso está Diego Romero, gerente de Damagro Farms. Él compra flores para armado de bouquets a Pacific desde hace nueve años. Él destaca la calidad, precios competitivos y disponibilidad de la firma.