En su planta de producción del sector La Legarda (norte de Quito), que cuenta con una extensión de 1 000 m², los trabajadores realizan cortes de los tableros.  Foto: Vicente Costales / LÍDERES

En su planta de producción del sector La Legarda (norte de Quito), que cuenta con una extensión de 1 000 m², los trabajadores realizan cortes de los tableros. Foto: Vicente Costales / LÍDERES

Su mobiliario llega a tres países

15 de febrero de 2017 12:32

Seguir muy de cerca la situación económica, tanto nacional como regional, ha sido uno de las estrategias para que Auron, empresa especializada en mobiliario de oficina y de hogar, haya sorteado la contracción económica del país en los dos últimos años.

Y no solo eso. Esta compañía quiteña se alista para abrir oficinas en Bolivia en este año. Así lo comenta Fernando Mera Criollo, gerente financiero, quien sostiene que decidieron apostar por ese mercado debido al buen momento que atraviesa el país andino.

“Ya con una oficina esperamos tener un porcentaje significativo de exportaciones. Bolivia es uno de los países con mejores indicadores macroeconómicos de la región. Tienen una necesidad de infraestructura muy grande”, manifiesta Mera Criollo.

Actualmente, Auron exporta en volúmenes pequeños a Perú Colombia y Bolivia, como tableros de madera y modulares terminados de oficina.

Para abrirse a otros mercados, la empresa hizo camino desde el 2002. En ese año, Fernando Mera Caicedo -padre de Mera Criollo- decidió incursionar en el negocio mobiliario debido a que la arquitectura le permitió conocer de cerca este segmento.

Para iniciar invirtió USD 55 000 que se destinaron a la compra de maquinaria y a la instalación de una planta de unos 1 000 metros cuadrados , ubicada en Calderón (norte de Quito) y un ‘show room’ y oficinas en la avenida 12 de Octubre (norte de la ciudad).

En principio, la empresa fabricaba artículos como closets, muebles para cocina y baño, escritorios, ‘counters’ de recepción etc.

La mayor parte de la producción se hacía en su planta pero también importaban partes de Colombia. Sin embargo, desde esa época la firma ha buscado que la manufactura sea mayoritariamente local.

Mera Criollo sostiene que el 2006 fue el año de consolidación de Auron. En esa época, la firma suscribió contratos para implementar mobiliario en proyectos habitacionales y de oficinas.

Uno de ellos fue la dotación de closets para los consultorios de la nueva Clínica Internacional.
Debido a la creciente demanda, Auron abrió una renovada planta de 1 000 m² ubicada en el sector de La Legarda (norte de Quito).

A partir del 2008, la empresa comenzó a participar en los concursos de compras públicas y se adjudicaron proyectos con entidades como la Contraloría General del Estado, el Banco Central del Ecuador, el Banco del Instituto Ecua­toriano de Seguridad Social (Biess), la Agencia Nacional de Tránsito, entre otras.

Ahora, el 60% de sus contratos son con el sector público y el 40% restante con el sector privado, como Laboratorios Pfizer, Colegio Americano, Coca-Cola, Banco Pichincha, Produbanco, entre otras.

Otro de los aspectos para que la empresa se haya posicionado entre sus clientes, según su gerente comercial, es la personalización del mobiliario. Mera Criollo sostiene que la compañía se adapta a los requerimientos que sus clientes piden, de acuerdo con sus espacios. De hecho, Auron también ha diseñado sets para televisión.

En el 2015, la firma abrió otra planta de 2 000 m² en Pusuquí (al noroccidente de Quito ) que se especializa en lacado y metales. En total, Auron ha invertido cerca de USD 850 000 en maquinaria.

Auron amobló las nuevas oficinas de la Secretaría Nacional del Agua (Senagua) en Quito, en el 2011. Javier Jaramillo, quien en esa época era asesor de la entidad, comenta que la empresa se encargó del mobiliario de tres pisos y que cumplió a cabalidad las especificaciones solicitadas.

Impodisof, empresa importadora y comercializadora, ha trabajado en conjunto con Auron para amoblar diversos proyectos. Wilson Lozada, gerente de esta, sostiene que la firma “tiene excelente maquinaria, buenos acabados, buen producto y buena calidad”.