El trabajo remoto requiere inversiones en implementaciones tecnológicas. Allí la clave es que la empresa brinde las facilidades y que el empleado las aproveche bien. Foto: Freepik.es

El trabajo remoto requiere inversiones en implementaciones tecnológicas. Allí la clave es que la empresa brinde las facilidades y que el empleado las aproveche bien. Foto: Freepik.es

Los niños, un reto en el teletrabajo

20 de marzo de 2020 15:48

Desde la semana pasada, debido a la crisis sanitaria que enfrenta el mundo a causa del c­ovid–19, miles de trabajadores han debido realizar sus actividades en su vivienda, vía Internet y, al mismo tiempo, cuidar de sus hijos que no pueden ir a la escuela.

Para teletrabajadoras como Priscila Kon, madre de tres niños, es una tarea titánica. “Tengo que hacer tres cosas en el día. Mis actividades como madre y en el hogar, hacerme cargo de la educación de ellos y cumplir con mis tareas profesionales. Confieso que el primer día fue muy duro, difícil. Conversé con algunas madres y me contaron que han estado en la misma situación, ha sido complicado”.

Ella considera que en estas condiciones no se es 100% productivo. Sin embargo, hay una solución para que las cosas puedan fluir de mejor manera: el orden.

Kon, quien también es experta en recursos humanos, señala que en estos días desarrolló una rutina: se dedicó a los niños en la mañana y en la tarde a lo profesional. A partir del pasado martes su esposo se unió al teletrabajo, lo que también fue de ayuda.

Ella aconseja planificar las tareas, que se harán al día siguiente en la noche, lo que evitará que se acumulen cosas. También dice que es importante medir tiempos y establecer cuánto tomará realizar diferentes actividades.

Es importante que todo teletrabajador defina con su empresa si las tareas deben realizarse en un horario determinado o si es posible enviar sus asignaturas en el momento del día en que se pueda. Eso le permitirá tener un horizonte diario.

Colocar alarmas en el teléfono que le avisen qué tarea debe cumplir, sea del hogar o sea de la compañía en la que se labora, es otra alternativa de organización.

Javier Verdesoto, CEO de Nexos Talent EFH Ecuador, explica que otro elemento que da orden a los teletrabajadores es un espacio adecuado. Explica que durante las horas en que se realizan las tareas profesionales, el trabajador debe ubicarse en un área únicamente destinada para ello; los niños deben realizar sus actividades en otros lugares del hogar.

“El mundo cambió para siempre su forma de trabajar y es necesario que la familia se adapte. Es fundamental hacerles comprender a los pequeños por qué uno está en casa y evitar estresarles. Ellos deben saber que uno está laborando y que necesita su apoyo. Debe haber tiempos tanto para ellos, como para la empresa. Respeto siempre”, indica Verdesoto.

Esto lo ha hecho María Limaico, para quien el teletrabajo con niños no es una novedad. Ella aplica esta metodología desde que su hija, de 4 años, era una bebé.

“Para mí se volvió todo complicado porque ella pasa en la casa las 24 horas al día y me tocó reorganizarme para no afectar a mi productividad. En las primeras horas del día, antes que ella se despierte, despacho informes, reportes y otros temas urgentes. Cuando se levanta me toca atenderla y también asignarle responsabilidades. Ella está en un centro infantil y las maestras les han enviado videos y otras actividades para que esté ocupada”.

De la misma forma como se organizan los trabajadores, es importante que las empresas definan estrategias. Verdesoto explica que el modelo de labor vertical tradicional no puede seguir en estas circunstancias. Para este especialista, es hora de reestructurar procesos, dejar a un lado las jerarquías, hacer cambios de cultura organizacional, mejorar la tecnología, etc.

Hasta mediados de este mes, el Ministerio de Trabajo manejaba una cifra de 15 500 teletrabajadores en el país, con mayor concentración en Pichincha y Guayas. Hasta octubre del año pasado, el 70,9% de los teletrabajadores eran hombres; los principales sectores en los que se encontraba este personal eran comercio, actividades profesionales, servicios administrativos e información y comunicación. Ahora, con las medidas sanitarias aplicadas en empresas de todo el país el Ministerio tiene una cifra que supera los 235 000 teletrabajadores, tanto en el sector público como en el privado.

Paúl Murillo, líder de consultoría de Adecco, explica que hay que buscar maneras para mantener la calidad y la productividad al aplicar esta metodología. La comunicación con el equipo de trabajo es fundamental: reportes de avance de las tareas, conexión permanente, cumplimiento de objetivos en el día y la semana, etc.

El experto recuerda que no todos los cargos pueden laborar en el teletrabajo y en ese caso las organizaciones tienen que organizarse dependiendo de las decisiones de las autoridades. Las compañías deben saber que no se puede correr alto riesgo.

El trabajo remoto requiere implementaciones tecnológicas. Existe la posibilidad de acuerdos para que la compañía pague total o parcialmente las facturas de consumo de Internet u otros servicios que ocupe el empleado en su casa. Algunas empresas solo requerirán Internet y una computadora, pero en otras habrá que contratar licencias de programas especializados, ‘chatbox’ o sistemas VPN.