lunes 15/12/2014

El penetrante aroma a cacao se siente desde el ingreso. En el interior, sus semillas se secan al sol, en una amplia explanada adecuada como tendales, a un costado de dos enormes galpones. Es la primera planta procesadora de cacao que inaugura la Fundación Maquita Cushunchic (MCCH), una organización sin fines de lucro que trabaja con campesinos del país desde hace 29 años.