El sector bananero llegó a una productividad de 1 800 cajas por hectárea. Foto: Referencial

El sector bananero llegó a una productividad de 1 800 cajas por hectárea. Foto: Referencial

El dólar modificó al comercio exterior

15 de noviembre de 2017 13:29

El dólar cambió al comercio exterior ecuatoriano por la estabilidad que brindó y por la recuperación económica del país, pero también representó cambios de estrategias de exportación.

“Los empresarios entendieron que no es posible ser competitivo por las devaluaciones sino con productividad, calidad, innovación…”, dice el presidente ejecutivo de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor), Daniel Legarda.

Según Legarda, el sector productivo trabajó en las variables duras de la competitividad como mejorar la infraestructura, promoción, apertura de mercados, reducir costos, invertir en tecnología, calidad, entre otras.

Él reconoce que hubo apoyo del sector público, “pero los cambios no se dieron a la velocidad que se requiere”. En las últimas dos décadas, la oferta exportable ecuatoriana creció y los mercados se diversificaron. El número de productos nacionales que se venden al exterior pasó de 1 500 hace 17 años a más de 3 000, en la actualidad.

Legarda dice que, si analizan los ítems que representan ingresos superiores a USD 100 000 anuales, la oferta exportable subió de 450 productos a cerca de 950. En el caso de los mercados aumentó de 130 a 160 países.

Eduardo Ledesma, presidente de la Asociación de Exportadores de Banano de Ecuador, coincide que los mercados se ampliaron y su sector aumentó la productividad de menos 1 000 cajas por hectárea a 1 800 cajas, en las últimas dos décadas.

Agrega que se mantuvo el liderazgo del banano nacional a nivel mundial y se amplió el área de cultivos. Para él, esos resultados se concretaron gracias al esfuerzo privado, que tuvo el apoyo de los sectores financiero y público, sobre todo, para las empresas consolidadas.

Iván Ontaneda, presidente del Directorio de Fedexpor y miembro del Directorio de la Asociación Nacional de Exportadores e Industriales de Cacao del Ecuador, tiene una lectura sobre estos 20 años. Según él, en comercio exterior y, en especial, en exportaciones hay tareas pendientes por parte del sector privado y del público. “Nos hace falta un plan estratégico elaborado entre los dos sectores, que nos permita tener una visión estratégica a futuro. Lo que hizo Perú en el 1997 cuando pensó en qué sectores iban a crecer hasta el 2020”.

Ontaneda resume que el Ecuador necesita una visión a mediano y largo plazos para saber cuáles productos tienen ventajas competitivas versus otros países y, sobre todo, qué necesita el mercado internacional. También, se requiere de más acuerdos comerciales importantes como el logrado con la Unión Europea y estamos rezagados frente a Chile, Perú, Colombia...

En el caso de las importaciones, el gerente en Guayaquil de Home Vega, Oswaldo Calero, dice que la dolarización ofreció estabilidad para comprar en el exterior y ofrecer un precio fijo a los clientes, quienes tuvieron la tranquilidad para hacer proyecciones de gastos y endeudarse para adquirir bienes. “Las facilidades para importar siempre hubo, pero el dólar quitó la zozobra de las devaluaciones”.