Sofía Almeida, presidenta de la Cámara de Industrias y Comercio Ecuatoriano Suiza, analiza los beneficios del acuerdo con la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA). La oferta exportable agroindustrial del país es uno de los sectores con más opciones de negocios.

¿Qué oportunidades detecta para las empresas ecuatorianas, cuando entre en plena vigencia el acuerdo con la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA, por sus siglas en inglés)?
El valor para las organizaciones y empresas de Ecuador es que podrán conectarse de una forma más fácil con sus pares. Cuando una empresa ecuatoriana quiera establecer una relación comercial con otra en el bloque, deberá entender el valor de hacer negocios con los europeos. Si una compañía ecuatoriana implementa un modelo de excelencia, se facilita esa conexión. El buen trabajo y la calidad, así como el liderazgo son aplaudidos en países europeos.

¿Cómo se conecta la oferta exportable ecuatoriana con los gustos y preferencias de los consumidores europeos?
Desde ya, varias empresas están haciendo estudios para conocer los gustos de los consumidores y enfocar su producción hacia nuevos nichos de mercado. Hay que reconocer el alto poder adquisitivo que tienen en EFTA y su preferencia por producto de valor agregado. Por ejemplo, en la Cámara hemos recibido a pequeños empresarios con productos novedosos como aceites de plantas medicinales o flores de la Amazonía. Esos artículos no tienen una buena aceptación en el país, pero en Europa son muy demandados.

¿Qué sectores productivos podrían ingresar con mayores ventajas a los países que integran EFTA (Suiza, Noruega, Liechtenstein e Islandia)?
Hay oportunidades para el sector bananero, atunero, camaronero, florícola y cacaotero. Es un mercado de un alto poder adquisitivo. Para los consumidores europeos, lo más importante es la calidad, innovación y competitividad que demuestren.

En específico, al mercado de Suiza…
Suiza es el principal destino de los envíos que hace Ecuador a EFTA. Por esta razón, los exportadores enfocados en este mercado serán los mayores beneficiarios una vez que entre en vigor el acuerdo (NDLR. el Gobierno considera que sea en el último trimestre de este año). A este mercado actualmente se envía quinua, harina y polvo de banano, orquídeas y aceite de palma, entre otros productos. Es un país que demanda frutas, por eso hay gran potencial de exportación para variedades como mandarinas, sandías y uvas.

Uno de los problemas de Ecuador es que mantiene una baja competitividad, ¿cómo superarlo, para sacar el mayor provecho posible?
Las empresas deben moverse y pueden hacerlo. Ecuador es un país que ha evolucionado y puede adaptarse. Las pequeñas y medianas industrias, que son las que se impulsarán con el acuerdo, deben analizar qué necesitan para ser competitivas, también pensar en cómo crear esa estrategia; también en cómo crear valor de producto y servicio.

¿Cuál sería el efecto dinamizador que tendría la vigencia del bloque EFTA en el país?
En primera instancia, la creación de nuevas plazas de empleo. Sabemos que el sector productivo tiene mucha oportunidad dentro del bloque, sobre todo la pequeña y mediana industria.

Además, existe una apertura muy amplia para las empresas de la economía popular y solidaria, algo que no se ha visto en los otros tratados internacionales. Esto, sin duda, incidirá para que más personas se inserten al mercado laboral.

De las empresas suizas que ya tienen operaciones en Ecuador, ¿cuáles analizan incrementar sus inversiones a partir del acuerdo?
Más allá de invertir capital, porque estas empresas ya tienen varios años operando en el país y la inversión ha sido elevada, es repotenciar la oferta que tienen. Ecuador acoge a firmas de seguros, farmacéuticas y de alimentos.

¿Qué tipo de nuevas inversiones se pudieran captar con el tratado comercial?
Es difícil decirlo, eso se verá después de un tiempo de la entrada en vigor del acuerdo. Además, por los efectos que deja la pandemia, las inversiones quizá no lleguen tan temprano. Recordemos, además, que no solo Suiza conforma EFTA, también está Noruega, Islandia y Liechtenstein.

¿Cómo nace la idea de formar una cámara binacional Suizo Ecuatoriana (NDLR. el pasado 16 de julio se realizó el lanzamiento oficial de la Cámara de Industrias, Comercio y Servicios Ecuatoriano Suiza, Swisscham)?
Tres años atrás las multinacionales suizas, presentes en el país, teníamos la intención de conformar un gremio como una plataforma para intercambiar ideas y fortalecer el vínculo que hay entre ambas naciones. Una de las principales líderes de la iniciativa fue la Embajadora de Suiza en Ecuador y a ella se sumaron empresarios de 20 firmas domiciliadas en Ecuador. El empuje final para la cristalización de la idea fue la firma del acuerdo con EFTA, que se concretó en el 2018.

¿Cuántas empresas integran actualmente el gremio?
Actualmente, somos 21 empresas. Los representantes de estas firmas participaron de una asamblea general que se realizó en febrero, en donde se decidió legalizar la cámara y hacer el trámite correspondiente ante el Ministerio de Producción.

¿Cuáles serán las principales acciones a desarrollar?
El intercambio de conocimientos es nuestro principal objetivo. Tenemos un acuerdo comercial con EFTA que está próximo a entrar en vigor y hay algunas empresas o potenciales que no conocen todos los beneficios que puede ofrecer este mercado. El primer punto de acción que se tendrá es la capacitación a través de charlas, webinars, seminarios. La primera capacitación se realizó en julio.

¿Cómo se incorporará la cooperación internacional para impulsar el desarrollo de la Cámara y la capacitación de los pequeños productores que quieran sacar provecho del acuerdo con EFTA?
Por supuesto, eso se lo irá incluyendo poco a poco. El objetivo de la Cámara también es ofrecer servicios y para lograrlo es importante la cooperación internacional. Sobre todo, para los agremiados o pequeños exportadores que quieran aprovechar todos los beneficios del tratado. Y en especial para los que tengan como destino de sus exportaciones a Suiza. El intercambio de experiencias por parte de las empresas suizas domiciliadas en Ecuador es vital. Los interesados en ser parte de la Cámara pueden ser personas naturales o jurídicas. Lo que deseamos es que muchos más empresarios se unan para fortalecer la misión de la cámara: la conectividad y el nexo comercial de las empresas.

El idioma puede ser un limitante para hacer negocios...
Podría ser un inconveniente, pero es solucionable. A través de la embajada (Suiza) y con los servicios de la Cámara se ayudará a que los potenciales exportadores puedan afianzar sus relaciones.