Ruth Arregui se ha desempeñado como Gerente General del Banco Central del Ecuador (2011-2013)

Ruth Arregui se ha desempeñado como Gerente General del Banco Central del Ecuador (2011-2013). Foto: Archivo / Líderes

Ruth Arregui: ‘El sistema financiero es prudente’

21 de abril de 2020 10:41

Ruth Arregui es la Superintendenta de Bancos cuenta las acciones que se están implementando en el sector financiero para enfrentar el covid-19. También explica el refinanciamiento de créditos y cómo la ciudadanía está aprendiendo a utilizar nuevos canales de la banca.

¿Cómo está reaccionando el sistema financiero a la emergencia sanitaria? ¿Se puede comparar este hecho con algún episodio del pasado?

Desde mi posesión al frente de la Superintendencia de Bancos, con mi equipo de trabajo veníamos procurando establecer un ambiente propicio para el camino a recorrer por parte del sistema controlado por la Superintendencia para ir hacia Basilea III. También veníamos adoptando medidas que permitan a las instituciones mejorar sus condiciones frente a un escenario adverso de no crecimiento de la economía nacional y de un desempeño pobre del sector financiero internacional. En ese camino adoptamos medidas como planes de contingencia de liquidez, planes de continuidad del negocio. En particular quiero referirme a la instrucción de un reparto máximo aproximado del 30% en dividendos y el 70% restante de las utilidades para la capitalización de las instituciones con tres efectos positivos: mejorar el patrimonio y la solvencia; mejorar los indicadores y márgenes para colocación de recursos, esto es dar préstamos al sector productivo; y robustecer sus sistemas tecnológicos para mejorar los productos y servicios financieros, cada vez más operados remotamente o banca virtual.

¿Cómo se ha actuado ante la pandemia del covid-19?


Se intensificó la participación y coordinación de la Superintendencia de Bancos en la Asociación de Supervisores Bancarios de las Américas, filial del Comité de Basilea. Esto nos ha dado guías y recomendaciones para enfrentar la contingencia. Primero con la exigencia del Plan de Manejo de Emergencias para Implementar estrategias y acciones concretas para controlar y minimizar los efectos de la pandemia, en clientes y personal de los propios bancos; y, segundo con el diferimiento extraordinario de obligaciones crediticias. A esto se suman otras medidas de aislamiento y bioseguridad.

¿Existe alguna situación del pasado con la que se pueda comparar esta contingencia ?

No existe un antecedente comparable a este episodio de la pandemia del covid-19. Se han presentado situaciones adversas en épocas relativamente recientes como la guerra con el Perú; la crisis económica y financiera ocurrida en el año 1999; o la crisis financiera internacional de 2008. La dimensión de los impactos derivados del covid-19 ya están evidenciándose en la economía, con pérdidas por la reducción en la actividad económica y casi el 70% de las empresas se encuentran paralizadas, según informó en días pasados el Ministerio de Producción. El escenario ha sido agravado por la guerra de precios del barril de petróleo. Sin embargo, tenemos un sistema financiero que ha sabido hacer las cosas y ha sido prudente en el manejo de la liquidez, recursos que están sosteniendo la economía en esta coyuntura.

¿Aplicar las medidas dispuestas por la Superintendencia es menos complicado para los grandes bancos?

No necesariamente, la versatilidad, adaptabilidad y rapidez en la adopción del nuevo marco normativo radica en la robustez y capacidad de los sistemas informáticos, la capacitación del personal y la vigencia y pertinencia de los manuales de procesos que definen eventos y procedimientos a seguir en caso de emergencia y contingencia, aplicables a estos casos.

Debido a la situación de emergencia mundial como la que estamos atravesando podrían existir inconvenientes derivados de incidentes no contemplados en los manuales internos y en la estimación de los riesgos, como por ejemplo, la relación con proveedores externos de servicios críticos para el desarrollo de ciertas actividades que podrían ocasionar ciertos retrasos. Puede darse la necesidad de cambios en los registros contables derivados de las reformas normativas. De allí la importancia de adopción de alertas tempranas y medidas preventivas y prospectivas.

Existen dudas de los usuarios de la banca en la actual coyuntura. ¿Si un cliente refinanció su crédito le cobrarán más intereses que si paga normalmente en la fecha prevista inicialmente? ¿Refinanciar implica que al final termina pagando más?

El refinanciamiento significa la consolidación de todas las deudas que el sujeto de crédito mantenga con la entidad de los sectores financiero público y privado, al momento de instrumentar la operación. En este caso, la tasa de interés se mantiene. Hay medidas temporales como modificar las condiciones originalmente pactadas de las operaciones de crédito de los distintos segmentos. Además, los saldos de créditos que no hubieren sido pagados en las fechas de vencimiento se transferirán a las correspondientes cuentas vencidas a los 60 días posteriores a la fecha de vencimiento de la operación. Las operaciones señaladas no serán reportadas como vencidas en el registro de datos crediticios por parte de la entidades financieras. Este diferimiento extraordinario de obligaciones crediticias no generará costos adicionales ni comisiones para el cliente.

¿Qué pasa con las deudas ya vencidas antes de la emergencia?

Se negociarán conforme cada caso con la entidad financiera, a fin de optar sea por un refinanciamiento o una reestructura. Se entiende que aquellas cuotas vigentes y que vencían en marzo, y las posteriores de abril, mayo y junio son las que podrían acogerse al diferimiento.

¿Cómo quedará el sistema financiero luego de la emergencia?


Buscamos la resiliencia del sistema financiero ecuatoriano pero sobre todo su fortalecimiento de cara al futuro. Para ello es imperativo contar con instrumentos que permitan la sostenibilidad de la cadena de pagos y en principio mantener la actividad económica para que luego retorne a los niveles que permitan crecimiento en la economía ecuatoriana.

¿Los clientes madurarán en el sentido de usar nuevos canales?

Uno de los más importantes aprendizajes para los usuarios y clientes del sistema financiero, ante las restricciones de movilización experimentadas para realizar sus transacciones de manera presencial, ha sido el acceso y uso de los canales electrónicos para la ejecución de sus transacciones bancarias, pero no toda la población es beneficiaria de estas facilidades de inclusión. También implica a la banca la adopción de acciones que deben ser implementadas a fin garantizar que estas operaciones sean seguras para el cliente; y, por su parte el cliente deberá ser consciente de las medidas de seguridad que debe de tener en cuenta para su uso.